3l
sima de la doctrina ckrfstiana:
mira que la Igle–
sia congregada en el Espíritu Santo se valdrá
de tus escritos para establecer sus Dogmas de
Fé, siendo tu aquel Angel del Apocalípsi (1 ),
a
cuya voz resonarán los siete truenos en otros
tantos Concilios Ecúmenicos
(2):
mira Tomás
por ultimo que los
PP.
del Concilio Lugdunen–
se recibirán con las mayores demonstraciones
de estíma tu Opusculo
contra erróres Grcecó–
rum,
y
será de tanto aprecio , que despues lo
vertirán los Griegos en su proprio idioma
(3):
pues calla Tomás ,
y
no llames ignorancias
a
tus escritqs.
·
Sí , insíste Tomás , sí; ignorancias son mis
escritos , pues son escritos del mas minimo de
los Frayles Predicadores :
Ego
Fr.
Thomas,
mi-
1iimu$
in
Ordine
Fratrum Pn.edicatorum
(
4):
¡
O
abísmo de humildad
!
¡O humildad la mas pro–
funda
!
Yo bien sé,
A.
O.
M.,
como lo enseña el
mi
mo Santo
(5),
que es proprio de la hu–
mildad el tenerse el hombre sabio por ignoran-
E
2
te;
(1)
Apocalip. c.
10.
v.
3.
(2)
Nota
que
se cuenta el Basil. en la p:irt. que fué
legit. Lugd.
1..
Vienn. Constanciens. Florent. Lateran 5.
y
el Trident.
(3)
Taucci Serm. S. Thom.
(4)
D. Thom. in Prolog. Opuse. de
c1·ud.
Princip.
(S) D.
Thom.
·1.~
2";
qu:es.
i
6
r.
art.
6.