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DE

CHRISTO.~CAP.

XXIII.

471 ·

sí,con grande congoja comenzó

á

negar,á jurar,y perjurar:

~e

no lo conocia,ni fabia aquello que ellos decian:Et

crepit de,teflari;

&

jurare

,

quia non nv'l1i hominem iflum quem dicitis.

(g)

Y

eíl:ando

él

diciendo eíl:o ,

cantó el gallo

: .

Et adhuc eo loquente gallus can–

talJit

;

~

co_n'lJerfus ffJominus re(pexit Petrum

, :

'lJol'lJiendofe el Señor

miró

á

San Pedro:

(h)

Y

acordófe

el

Santo de lo que

el

Señor le di–

jo:

Et recordatus

efl

Petrus. Saliife fuera

á

llorar

,y

lloró amarga:.

mente

:

Et ingrejfus foras crepit flere

,

rt2"

fle"Dit amare.

(i)

5

Efia fue terrible caída

á

Pedro, gran vill:oria al enemigo,

gran troféo

á

los Sayones , grande dolor

al

Señor. Pues

fr

·san

·,

Pedro, que fiempre lo confesó , lo niega , ¿quién queda que lo

confiefe

?

Y

íi

el

amante le defompara , quién queda yá que lo

·a1ne

?

duda hay que quando le miró

el

Salvador de las almas,

le diria interiormente , con

l~ces

de caridad, y dulces lenguas de

amor ,

á

fu Difcipulo :· ¿Pedro , tu niegas

á

tu Maeíl:ro

?

Tu def–

conoces,

é

ignoras tu Redentor

no me queda que Ícnti.r,

fi

el

que n1as me ama , me

nh~ga

porque eüoy prefo. No me

cono~

ces , eíl:ando prefo por ti

?

Y

quando yo confie(o lo que te quie-

ro

en.lo

que padezco,

~u

me niegas, por no pagecer por mi? Siem-

pre temiíl:e que yo padecie

e ,

Pedro ,

y

es que receló u cora-

zon , que me babia

de

nega r

al

padecer.

O

quanto

tnas me

ne..i.

gáras ,

fi

por

ti

o padeciera

!

Mucho dorrn_Hte

al

vdar·

efi

el

.huerto , y ahora ddpicrto

me

niegas. Qié

mal

cfpertaíl:e , Pe..:.

dro ,.,mas

te

valiera dormir! ¿Tu conoces

al

temor, 'que ardias

en caridad

?

tiene

que temer , al que abrafáre

el

an1or

?

No temas Pedro las penas, no llores fino las culpas. Nunca inas

he

fido Dios_, que ahora que padezco por los hombres;

y

tu

en–

tonces tnas me niegas , quando 1nas me manifieíl:o. Las luces,

que viíl:e en

el

Tabór , te las dí'. para que ahora n1e confieles,

y

n1c crea

1

s ; y que entre las tinieblas del padecer, tengas prefente

la

Divi~,

dad

del

sér,

y

n1ires aq_uella luz. ¿Tu, Cabeza de la

Fé,

y

la

Pir~ndament_al

de

la

Igleíia,.tetnes por lo que parece,

y

no

te atreves

a

con fefor por lo que es

?

Vive .á la fé Pedro,fi quie–

res vivir, que los

ojos

cada momento fe engañan ; obra como

crees,

y

no creas como ves. Pues

el

primero de .todos tne confe–

faíl:e , llora

el

habern1e negado. ¿Tu no digiíl:e , que darias la vi–

da á

mi confdion _;

y

qu,e i.:io n1e' negarias?

~ífo

digiíl:e en

la

Ce-

na,

(g) ExMatth.

i6.v.

H•

(h) ExLuc.

u.v. 60.

(i)

Idcmibid.v.

61.

&

63.