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B R O VI.
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A P. XXX.
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2
1
5
'Apoíl:oles le rcfpondian ,
y
hablaban; pero viendo
yá
n)as cerca
del Señor , entre lo Hun1ano,
y
lo. Divino , le ªdoraban ,
y
no
hablaban : fignificando con eíl:o, que no
~s
la lengua la que me–
jor explica el amor ; n1ejor lo explica
el
filencio ,
y la
reveren–
cia ,
y
el
fuego del corazon.
CAPITULO XXXI.
2PO~Q!!E
LOS VISCIPULOS
:J\(SJ
preguntaron al Señor:
Tu quis es :
luego que los
convido
a
comer
~
Projiguen otras
ra~nes.
O
Fri1nero :
á
·n1as de lo referido ,. decimos , que
con callar los Apoíl:oles,
y
no preguntar:
Tu
~ uir
es?
que-es lo que dice
el
Sagrado Evangeliíl:a, que
no
0~1ron
preguntarlo, vencieron una tentacion,
qu fu e e llir poderofa en los varones fpiritu-ales.
Porque defpues de
haH
r conocido
ái
fo
Madl
o los Aeoíl:9les en
el
mibgro , en
el
rofrro
en la voz,
y
en
1-a
Humanidad,
y
en
la
Divinidad , no quifiero
1
curjofidad bufca
mas
conoci–
mientos , ni penetrar curioíidal es inutiles , ni hacer esfuerzos
de vana fabiduría ,
Tu quis es
?
fino agu ardar
á
que
el
Señor
fe
lo digeífe,
y
eífo deben hacer los efpirituales ,
á
los quales mas
toca fervir, que no preguntar, obedecer, que no averiguar. Lo
fegundo : porque
la
pregunta era terrible,
Tu
quis es?
quién eres
tu
?
y
eífo falo puede preguntarlo Dios Jl tomarnos
la
cuenta de
los talentos ; pero que uno
á
otro , olvidandofe de st, averiO'ue
I
I
D
lo que pafa en los de111as,
y
ande preguntando
a
los otros :
Tu
quis
es
?
y
no
fe
pregunte
á
st:
0:.js fam
ego?
no es camino
de ef–
piritual.
2
Los Hebréos fueron
á
pregunta~
á
San Juan, qllien era,
y
con eíl:as mifmas palabras, que aqui efcribi6
el
Evangelif\:a:
Tu
quis es
?
(a)
y
con fer
~[si
,
que eran Levitas ,
y
Sacerdotes,
y
qu e
era
fi.1
cmbajJda propia de
fo
miniH:erio , pues fue fobre puntos
de Religion ; con todo eífo no tuvieron la refpueíl:a,
qu~
quifie....:
ron de San Juan ,
y
fiempre les refpondia por indireébs:
No
_foy
Me-
th)
Joan. 1.v. 19. ·