DE ÁST ,RONOMÍA.
,"797'
l'ára averiguar la paralaxe de un cometa , es men-ester co:. Fig.
~nocer su distancia
á
la Tierra (
6
3
z
) ,
y
dividielíldo
9
11
1
9
5.
1)0r
la distan~ia del cometa ( tomando por unidad la del Sol);
.se saca la paralaxe orizontal ,
y
por consiguiente la paralaxe
en
longitud
y
latitud para la hora de la observacion (
8
6
2;
·y
8
6
3-
).
Se tom~rá
el
nonagésimo en una tabla ,
y
bas–
~tará
tomar el primer término (
8
6
4
)
para la
paralaxe
4e
latitud , con
tal
que no sea
muy
grande.
.. Se aplicarán es;as paralaxes á la longitud observada,
en
una direccion contraria
á
la que dejamos indicada
(8 7 4)
/ quandó buscábamos.. la ·longitud '1parente , porque
aqúí
qüe: ¡
,remos valernos de la longitud verdader'a. :Los cometas
que
1
se a~~rcan mücho
á
1.a .
Ti~rra , tienen
1ú1a
paralaxe
m1-:1Y:
grande ,
en
tal estremo que eh algunos casos podría servfr
para determinar con puntualidad la del Sol ; el corneta ·
de
' i
7 7
o pasó
5
o veces mas cerca de nosotros que el Sol.
Por lo· que toca á la aberracíon de los cometas,
he–
-mos
dicho
tiempos ha (
7 7
2
J
lo
que es menester , -perü
..pide que conozcamos
la
distancia
y
.-el
movimiento diurno
geocéntrico por medio de dós longitudes, observadas
ó
cal·-
-:culadas-. Así, todas las .observacion~s que
han
de
s~rvii:
para
· calcular rigurosamente una
órbita ,
se han ·de dese.mbarazat
· de · los· efectos que no penden únicamente de la órbita· para–
bólica
ó
elíptica cuyo cálculo se intenta ,
y_
varían en
et
-discurso.
de
una sola aparici9n.
I
2-
6
2
Con. la mira de hacer mas perceptible
~oda
esta
doctrina la aplicaremqs al cometa d~ .
1
7:
5 7. Vamos
á