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·eI
qual
todo· el
cielo·
se
mueve
de· oriente ,., occ1dente. Fíg.
El sol dá cada día una revolucio.n al reµedor de nosotros,
pero al mismo tiempo anda un grado, con corta diferencia,
áda
una
direccion contraria,
ó
de occidente
á
oriente ,
y
-
~
corresponde
á
·diferentes puntos del cielo.
·1 2 1
Despues de observado con cuidado este movi-
miento an1=10 se ha averiguado que su rastro forma un cír~
culo llamado la
Eqltptica
,.
cuya posicion nos importa de–
terminar.
Por
decanta.do, l~ eclíptica ,. el camin_o ,anuo
y
.apa:•
,rénte del sol , es distinto del equador. La altura del eq~a.i
tior respecto de los primeros Caldeos que observaban
e11
Babylonia , era
de 5 4
° ;
y
si el sol se hubiera movido
eón
su movimiento anuo/ en el equador , le hubieran visto ca–
da día
á
la altura de
5
4
°
á
mediodia. Peto observaron
que en verano el sol subía
2
4
°
mas
arriba del equador,
;>j
eh
invie'rno · bajaba
2
4
º
mas abajo, por man€ra que su
al–
.tura
á
medíodia era de
7 8
º
en estío ,
y
de
3
oº no
mas /
en
, 'invierno ; de donde i~firieron que ·Ia eclíptica era ttn círcu~
lo
distinto del equador;
y
distante· de
él
2
4.º · Echaron
de
ver que este círculo cortaba el equador en dos puntos, por""'
que observaban dos véces al
año,
es
á
saber en
la
prima...
vera
y
el
otoño, que
la
altura del sol
_á
mediodiá era
de
;; 4
° ,
la misma que la
del
equador ;' de donde resultaba
que
aquellos dos dias el -sol estab~ en el mismo equador,
del
qual tres meses antes se
habi~ apartado
2
_fº
los dias
de
los dos
Solstiéios•.