Discurso III.
hijo, que nacio con mucho susto ,
y
espanto
de su madre, muy debil en Ios inferiores miem..
bros, y
foe
llamado Harpocrates.
I
5
Esta es la fabula de Osiris'
e
Isis'
de
quien dice Plutarco refiere solo la suma de los
capitulos, y aun aqui hemos omitido bastan–
te de
lo que este Escritor refiere , contentfo.. ·
donos con lo dicho , como suficiente
a
nues..
tro proposito. Esta
fabul~
foe
en Egipto, co–
mo por otras partes desde tiempo
inmemorial~
una relacion sagrada. Plutarco , que vivi6 eu
tiempo en que la religion Egipciaca estaba en..
su vigor, y este sagrado cuento en veneracion,
no piensa que esta narrativa sea totalmente
una mera fabula de la qualidad de aqueHas que·
a
SU
arbitrio fingen los Poetas' sin ningun fun–
damento
de realidad ,
tan fabulosas en sus prfo..
ci
pios , como en sus cohseqliencias : se persua–
de
que
esta es una narracion enigmatica, en que
se halla figurado un sentido espiritual ,
y
fi–
losofico (
1).
De
(1)
Enimvero hrec si sentiant ac dicant homines de beata
&
in~ritus
experte natura, qua potissimllm intelligitur numen,
tamquani re vera sic gesta
&
obita , despuendum esse ob in–
dignitatem rei,
&
os purgandum. , ut est apud
JE~chylum,
ni–
hil attine't 'ad te dicere. Ultro enim succenses
iis
,
gui
tam
im-