Previous Page  192 / 416 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 192 / 416 Next Page
Page Background

Discurso

111.

· _

·gon quiera beberse los resplandores del Sol,

y

dexarle privado de sus luces , ni menos

--que aquel lavatorio ,

preces -,

y

ceremonias

··aproveche

al Sol

para libertarle de

aquel tra–

bajo. Podemos sí discurrir que la

Teología

de _

los antiguos Pueblos

donde

aquellas Nacione.s

-derivan ,

~ué

la

de · los

-dos : principios ,- bue-

·no ,

y ·

malo , luz ,

y

tinieblas

cori

perpetua

lu..

··-cha

entre sí.

Nada· instruidos entonces

de

la

natura·lidad ~de

los

eclipses.

considerado

en

el

Sol

el

origen . de la luz ,

ó

el pri.neipio bueno;

-Y en su eclipsacion las tinieblas ,

ó

el

princi..

pío malo , ·se ·les representaba en

los

·eclipses

·solares el combate que

tanto témian.

Asusta-.

dos de que el .mal principio ;

ó

Jas tinieblas

salieran vencedoras , lloraban

con tristes alha–

,ridos la infelicidad que al Orbe amenazaba; -

;cuyo temor se convertía en alegria recnpera~

do el resplandor

del

Sol ·, en que·cr·eian .el ven–

cimiento de la luz,

ó

del principio bueno. Y

esto podemos creer

fue el origen

de la cere–

inonia.. Con el tiempo,

avedguada la naturá–

lidad

de ·

los ·

eclipses ·,

y

retenida la

misma

doéhina de los

dos·

principios ,

se

persuadián

. ver

en el eclipsado -Sol un exemplar de aque–

llo mismo que

en.

su

Teología

enseñaban.

R-etu–

vie•,