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9-I

·r

Munqo,

mundo,

yo te

aborrez–

.co

-~.·: pues

te ha convencido de fa1se-;–

.dad el Espiritu Santo. No sigamos,

pi

creamos al _, mundo , puesto que

á

~º~?s v~sos

es tan .mala su causa:.

1 •

Joh.

11 •

Htjos

rmos

;

no ameis al mundo

,

n;t

1

5 •

1

7 •

cosa

·a~'?,una

·de

las que fzay

en e:l

mundo: e/:mundo no es otra cosa qtf?

concupiscencia de la carne

,

sens1:1~

lidad,

y

deleytes corporales,

ó.

con·

cupiscencia

de···

los ojos

,

curiosidad,

y

avaricia'

y

orgullo de la vista

,y

todo ello .

(dicha

concup~seencia)

no

procede. de Dios, sino

aeil

.mundo,~

el _mundp p_asa can sus ifeseas'

y

·so..

lo Dios es el que permanece.

: · -· Con .que por

eso

fue juzgado el

mundo ;

y

·todas ·

st.is.

maximas _

l_a~

.condena- el Espirit

u ·S

anto con la

vi–

.da que inspira

á

los ·Fieles. No ·quei'

-da rastro de ·avaricia ,_ .en quien po–

~ne

todos sus bienes

á·

los pies de lo:s

1

Apostoles ; ·nó. hay division , ni dis:r

~ordia

entre ·los

·que no

tiene·n sin0>

-Un

corazon ,--

y

una

alma .';

no

se- en–

cuentr.~~

.deleytes ..sensifales _en los

.-. _i._

que ·

,.'