48 .1
ámarse
verdader~'1 y realmente~
·
Arriar
a
nuestros
proximos
CO•
mo
a
nosotros mismos es tener uri
amor de
compañia , .
y
de
igualdad.
Pero
el amor
de.Dios,
es
Gn
amor
·de sujecioa ,
y
dependencia :
aun.–
~1e-
una
sujecion ,
y
dependencia
snave , porque
es
~epender
det
bien '
y
unirse
a
el.
.
Debemos amar-nos
por
Dios ,
y·
no
á
Dios
por
nosetros. Si fuera .
necesario para agradar
a
Dios.aqo–
nadarnos,
y
.destruir~os,
como su–
pieramos que ese sacrificio le e -
. ngradable
a
Dios , debiamos ofre·
€erselo sin
titubear.
El
amor es un consentimiento,
y
una union
a
lo
que
es
justo'
y
ii
lo que
es
mejor.
Mejer
·es
que
Dios exista, que el
que existamos
nosotros.
No nos
engañemos :
el pecado
original dexa en
nosot1~os
el
vene-–
_no del <lmor
propio.
De aqui
nace,
que nos lo
referimos,
y
apropiamos:
todo ,
en
luga-r
d~ refer~rinos H~
so-