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-verdad: El Hijo de Dios sera entre–
gado entre las monos de los
hombres.
Mientras todo
el
mundo estaba
admirado
de
los
prodigios
que ha·
cia , los Apos.toles tenian el
cora-
zon cerrado
a
la
introduccion
de
lo que
les
enseñaba
sobre el
opro~·
l:io; que havia de
sufrir.
No
que–
rian oír nada de esto , ·que
era
puntualmente lo
que quería
Je~u-
._
Christo que supieran.
Corno
ha–
via puesto el
precio
de
nuestr~
sal
vacion
en sus
sufrimientos,
y
pe--
as,
y
en
la
óbligacion de
seguirle., ,-:.
de
llevar la
Cru~
en pos
de
et, ~· ~
es decia:
Asentad
bien esta verdad
/
~
~
I
t
en
vuestros
corazones.
~
Detengamonos
a
pensar
como -
e alucina ,
y
engaña el ho_mbre.
Quando
se
le predica lo
que
es
con~
rario
a
sus pasiones'
y
sentidos,
. 1
punto se
hace sordo.
Quant~
rrias
claramente
se
le
habla ,
mas
ter~
camente
cierra
los oidos.
Hace
que no lo
entiende ;
teme el acer.;..
ars
a
profundizar
la materia.
Si ,
. le