!t
los poderosos
soberbios,
y
ensalzó
á
los humildes. Lienó d e bi enes
á
los
ham~
brientos ,
y
reduxo
á
la
rr:ii
eria los
ri–
cos. Tomó baxo de su proteccion
á
su
siervo Israél , acordandose de su mise–
ricorcfü , segun prometió
á
nuestros
Pa–
dres , Abrabam,
y
sus d scendientes por
todos los siglos. Estuvo Maria con Isa–
bél cerca de tres meses;
y
despues se
volvió
a
su casa.
Virginidad de Maria. Instruccion del
Angel
á
San Joseph.
Mat.
I.
18.
2
5.
S
n
MJthéo.
Pero la
generacion de
Christo sucedi / de esta
manera.
Estando
d e po ada su Mach e
Maria
co11
J
oseph,
s halló, ante que se junra t n ,
y
sin ha–
bersejuntadojamás,
qu e habia
concebidó
por
la
virtud
del Espíritu
Santo.
Mas
Jo–
s
pi ,
u m;;rido, siendo justo,
y
no que·
ri
n o
delata
·}a ,
por conocer su castidad,
aunque no cómo habia concebido,
quiso
de ,
rla
ocul
a1
nte. Pero quando pen-
abd en
e
to,
e le a
pareció en
Sl
eños
el
Ang
ld 1
ñ
r, diciendole: Joseph,
~i–
JO