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La representa ción

emp~eza

con la expos icidn de la grande za de l a

cote imperial del Inca en Cajamarca , donde Atahualpa de

vu~lta

de l os

Baños de hulega eh un bao 1uet e qon sus oficiales y pallas l En estas

circunstancia s se le ha ce saber de la presencia de extraño s explora–

dores por l as cercanfas del va lle , Ocurre luego e1 tra slado del Inca a

l os Baños donde recibe la noticia del arribo de i os españoi es a l a pro–

pia 1ciudad . Ensegui da ll ega donde el Sober.anola primer a embajada .de

Pi

~arro ,

constitui da

únic~ment e

por el

int~rpreye

indio huah •avilca

Fel~pillo

que $e ll e¡va una carta r\esc omedi da al Inca , Vuel ve a recibir

a llf mismo l a s egunda emba j ada de Pizarra en la que vá Hernahdo de Soto

con Felipillo , Todavfa el Inca recibe una terc er a embajada e spañola com–

puesta por l os padres predicadores que van siempre con Felipill o , Final–

mente se muestra la proces iona l entrada del Inca acompe.ñado por sus no–

bles en la Plaze. de la ciudad donde es hecho

pri ~ionero

traidor ament e

tras de una breve y des':iigual r esistencia de l os indi os . Luego , mientras

el .Inc a ofrece el pr eci o de su r esca t e , subrepti ciamente o fuera de

es eena me fraguan un proces o judicial que súbitamente t ermina con la

sentencia de su muerte . La l ectura de esa pi eza <,lada por el ¡l;mbaja'd<$l::'r

es l o que escucha el Inca con el ánimo s er emo ; sin emba rgo , una vez

conclui da l e da por l amentarse de la ingr atitud de sus huéspede s y por

clam¡.r venganza al cie l o a l modo· cristinao , con l o que justament e t er –

mina l a representación dramática ¡

CRITICA HISTORICA ,- Como s e despr ende del s intético re:).ato del

desarrolb de l a acción , l os he chos históricos conocidos por las fu'Gntes

do cumentales or di na ria s , 'JUedan ci ertament e cortos en beneficio de l a

solidez y vigor de l a

e ~ po sición ~ramática ,

Por e¡ stos es

~ue

1

seguramen­

t e ya no entran , en l a pi eza

1

l os suc es o que medi a n

entre·

l a captura

y la expedici6n de la sentencia para la ej e cuci6n del Inca , Sucesos

t ale s como por e jempl o el famoso r epa rto de l os tesor os del r e scate y

otros detalles anecdóticos de la vida del Inca en l a prisión que

buena~

mente s e hubier an prestado a a l gunas escenas r ealista s o inten cional meg

te condenatorias de l a act itud de l os es pañol es , Per o e s de notar se ,

también ,

~ue

a cambio de est a

simplifi~a ción

de he chos el a rtis t a ha

introducido l ibremente - si es que no l o ha t omado de alguna fuente i–

nédita o tradi ci onal '- algunas otras esc enas efec tistas , c omo aquell a

de la primer a embajade. de Pi zarra cumplida únicamente por el intér pret e

indio huancavelica Felipillo , con un comportami ento por demás inapar en–

t e .

/!.

MODO DE CRI TICA

LITERt.RI

A;- SJ.n sentar t odavi a ningJn juicio

definiti vo sobre el valor e st ético de l a pieza , vamos a adelantar úni –

cament~

e.lgunas apr eciaciones s osbr e l o más s altante de e llR a pri mera

l ectura ¡ de jando c omo e s na tural l os f inales escl arecimiento a l a cri–

tica filol6 gi ca que s e va producir después .

Aparte de l a impresión magnÍ ficament e realista GUe se obti ene de

l a exposición dramRtica , son notabl es su sentido

e~J cativo

de l os he–

chos hist6ric os , plena ele una Acenr\r ada emoción i ncjl.genista

1

y su in–

t encionalidad fuert emente satfrica contra l os

per?~na j e s

español es , con

un mayor de s emboz o cier t ament e que l o hecho en el Usca Paucar y el Ollan

~

EL LENGUAJE QUECHUA

U S,~DO

EN EL DRAMA ,- En r ea lidad , no cabe duda

alguna

sobra la part icularidad di al e ct9l de l texto , a l estar eon el dato

preciso suministrado por el Sr . RvmP,r o acerca de la· procedencia del Có–

dice y del lugar del oual es

origir,~ario

el copista .

El d i a l ecto que chua del t exto , es , pues , el ancashi no

y

presumi–

bl ement e aun podriR ser el di alecto de Cabana, ele rtonde es el copista ,

des de que no sabemos perfectamente s obre l a fi delidad de su transcrip–

ci6n textual , Inducciones presumtivas mRs aguzadas s ob r e este particu–

l ar nos ll evarían a consider a r la existencia de una s eria pr obl emática _, .

r elatica al l enguaj e t extual , mientrils no se conozca directamente el cf

dice primiti'<";·o de Almendr a s ,

~,