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_La Paz, atraviesa de la cordillera Real en
su zona de menor resistencia, entre los ba–
tolitos del Illimani y la cordillera de
Quimsa Cruz, mediante una sucesión de ca–
ñones imponentes. Su cauce se encuentra
en aquella angostura a
1.700-1800
m.
S9-
bre el nivel del mar, o sea un nivel de
4.600
metros debajo de la cumbre del lllimani".
Se trata en la parte más profunda del terri–
torio, hacia la zona en que el río alimenta
al Coroico, en el mismo centro de vincula–
ción donde ya puede ser posible la nave–
gación fluvial.
RELIEVE
En la cadena de serranías que están den–
tro de la provincia y comprendidas en la
Cordillera o marcan su límite interprovin–
cial, casi todos son ·a manera de hermosas
decoraciones naturales, albeantes siempre.
El mayor de todos, pero no el más elevado,
el
Illimani,
con sus tres testas blancas, for–
ma un motivo de belleza extraordinaria, y
está a
7.509
metros sobre el nivel del mar;
el
Mururata,
exornado con una hermosa
1~yenda de una primordial batalla de gigan–
tomaquia, con su cumbre mutilada; el
Huayna Potosí,
cuyo nombre, que signifi–
ca
joven,
debe ser primitivo, puesto que el
agregado de Potosí es ya un descubrimien–
to y una construcción puramente coloniales,
se encuentra a
6.200
metros sobre el nivel
del mar; el
Chacaltaya,
de benigna grada–
ción, que ha hecho posible, debido a la te–
nacidad constructora y deportiva del malo–
grado ingeniero ·Alfredo ,Posnansky, una
práctica permanente de skismo, a
5.300
me·
tros sobre el nivel del mar; el
Shicani,
más
o menos de la misma altura. Desde El Alto
de La Paz o desde la cumbre del Chacalta–
ya, la cadena de cerros da la impresión de
una nívea ebriedad de alturas, donde
imponen su señorío el cóndor, la vicuña, la
vizcacha, la tarma, de un pelaje formado
por la crudeza glacial del ambiente físico.
-Bajando hasta el extremo límite de Zon–
go, la provincia Murillo participa de las
zonas de ·cordillera, con sus regiones frías,
donde la vivienda y el hombre han enrare–
cido; la puna, en que pervive la sobriedad
aimara; la vega, la cabecera de valle, el
trópico y finalmente la manigua inexplo–
rada e inexplotada. Tiene, pues, todos los
. climas
y
todos los productos del agro y del
subsuelo.
HIDROGRAFíA
Los deshielos permanentes de las cum–
bres nevadas, alimentan de agua a la ciu–
dad de La Paz, como el Chacaltaya .y el
Jampaturi, mediante captaciones, y dan vi–
da a sus ríos. Los primeros formados por
el deshielo, después del aprovechamiento
de su caudal en servicio de abastecimiento
de aguas potables, con el
Chuqui Apu,
que
en primitivo lenguaje aimara es "lanza ca–
pitana", y el
/ampaturi
y el
Chuquiaguillo,
unen sus caudales en la región de lrpavi.
El
/ampaturi,
dió lugar a los trabajos de la
nueva captación de aguas potables para el
barrio de Miraflo-res.
El
Chuqui Apu,
durante su curso, en zo-
. nas reducidas, sirve para la irrigación de
algunas sementeras. El trabajo de aprove–
chamiento de aguas todavía no ha sido
tentado a fondo; pero en Mecapaca hay
algunas manifestaciones rudimentarias.
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El río Chalana es linderante con la -pro–
vincia Larecaja y desemboca en Coroico."
El río Chacura nace en la cordillera del
Mururata y remonta sus aguas al Coroico.
El Tiquimani, también se une al Coroico.
El río Coscapa, comienza en el Huayna
Potosí y es afluente del río Zongo.
El río Camsiqui, tiene grande importan–
cia industrial. Da margen al funcionamien–
to de usinas hidroeléctricas en Cuticuchu,
Urikuña y Botijlaca, donde se genera la
energía eléctrica para la ciudad de La Paz.
Las instalaciones establecidas allí por The
Bolivian Power Company son inmensas.
Volveremos a ellas en el parágrafo de las
industrias. El camino de automóviles llega
hasta las mismas plantas.