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públicos señalados p:1ra tales casos, hacen demos –
traciones de :su pericia en la doma de potros ; lazos
y látigos de cuero; ojotas (zapatos indígenas) ; pe–
tacas de cuero , procedentes de Santa Cruz ; licoreras
y copas torneadas de madera de palosanto; bateas;
boquillas; muñecos y pelota:s del Beni; canastos dz
sauce (salix-alba) y de cañahueca ; peines de hueso
chanta y bambú ; mangos de cuerno, tinteros del
mismo material ; canastitos y ·anillos de cáscara de
coco, cruces y. ro:sarios de churqui o algarrobo (pro–
sopis-dulcis ), etc. No es extraño encontrar en las
ferias santos ·hechos de maguey y estuco.
En las provincias ce Chichas subsiste una
fiesta criolla , la de !·as carreras, y un juego, el de
las cinchadas, que ya llamaron vivamente la aten–
ción, ha tres decenios. de distinguidos viajeros entre
€!los del escritor Ciro Bayo ; en estas· ocasiones es
posible ver el alarde de opulencia aue hacen alq:unos
criollos: ingresan a la plaza de iuerros v al lugar
de las carrera·s montados en excelentes C2ball 0s apa ·
rejados con arreos v monturas ce riquísimo cuero
con chapas de artísticamente labradas .
A todo cuanto se ha dicho conviene todavta
añadir algo que tiene importancia. En la fiesta de
Todos Santos se h1cen en distintos lugar~s del país
muñeco~. de pan . bizcocho o azúcar para golosina
y regalo de grandes y chicos ; esta co:stumbre ha
sugerido en Padilla (Sucre) una 1nueva forma de
aplicación de la masa : se hacen delica·dos muñecos
oOlicroma.dos y que representan tipos · p opulares de
Bolivia , ti.pos europeos y americanos de distintas
épocas; oor la forma en que .están hechas todas es·as
preciosidades parecen a veces de norcelana, oues, los
encaj es y detalle:s d e los vestidos, las flores y otros
a :' orno.s llenan de sorpresa .
En suma , al estudiar todas l as formas del arte
popnl::ir bolivia no se ll ega a la conclusión de que