'cusoo
ffISTORICG
Et, JN'D 0
~.·
L AR
Ji'elipc
C~io
del
.Pomar.
en
8\1
obra
"1..a.
Pintura
C<i–
loaJaJ."
<Escuela
cusqueiia),
trae entre otraii
a:firro.Mio–
:Qe&,
aobre el ,\ndio en el
arte,
la.
sigui~nte:
•'El
ind.io.
como artist.a,
es
ca.paz
de prod.ucir s6lo lo
bonito
1
lo
facil.
No posee esa
cu.a.lid.ad,impreseindible
~el
renio
crea.dor. del tra
·ba.joarduo
y
la
con.sta:ncia;
es indud.able .que tiene predisposiciones
y
ta.lento
artisU–
oo; pero
es
inc&pa.z de un esfuerzo
bn•~,rado
y
oonscien •
lie;
la
paciencia es una de sus c.aracterist leas. pero
esta
no .
v.a.
aeompafiad.a
del esfuerzo intelectual
y
la. iniciativa.
creadora
imprescindiblc
pa1:a la obra. artistic.a.. Sus gran–
des
mon.~tos
arquitectonic-os ban sido el ·re.sultado a.e
un esfuerzo lento
y
col.ectivo;
ca.c:$
piedra.
a.l
ser
tra.ru.'J)O?'–
ta.Ela
al edificio que se
le
destinaba,
daba
1uga.r a fiestas,
cargandose entre milla.res de hombres. al oon de flauta.s y
tambortles. Podemos
000ervar est.a
misma costumbre
ho,v, en IM faerias
agrioo.Ias
que reJ.lizan de mejor mo–
do
cuandD
hay
mllsica
y
bebidas. Si qJieremos buscaa.·
un ejemplo de
esfuerzo
intelectua.l entre los mismos
amautas, vemos que si exjstieron entre elloo gieniales
acrtmres,
:,-u
producci6n
fue
esca.sa.
y
casi
sienpre .
en
eolaboraci6n, mostra.ndonos
que
el oolectivisrno invadi6
~
las
es!eras
de
sus actividades".
No est.a.
en
lo
clerto. el
distinguido
f'.SCI'itor indige.nlS..
1a
1
no mell<>S not.able pinoor cuyos
001.ceptos
acabamos
de reprodueir.
~ra
que
el
indio es
ea.ps.2
de produ–
-etr
s61o
Jo
bcmito
<13.mina
52)
y
esto no es
verda.d. Al
nspect.o,
dlce
UrieJ G4t'Cia,
fl.Ueta.n
hondo
ha
ca.lado
en el
alma
in~
lo
.siguient.e:
·~
a.rte
plistioo
i.ndio
es rudo.
baBtO.
~Po1 ·
que?
Aca~
~,
porque
lo
d.eforme
tien.e
mas energia expresiva
y
es,
55
hast.a.
a.ho?' ..
co..-no
iet
~idO. ~
it1greclimte
para
l~
imtuicion artisti<'.a de
nu.e.stros pueblo&. La.
for.ma.du·
ra, el
vo~umen
anguloso, corresponden mejor
que
la
cur~
va morbid.a.
o
la.
linea
gracil,
a
1a
grandaa
~
mundo
que
.se
dila.t.a
a
la
vista.".
El
a.rte
indigena.
ea a.nte
t:odo
colectQio.
Ho
es
indi–
ndual, como el arte europeo;
asi
que
hay
que
jlJ:l.gar–lo de.sde
W1
angulo
distinoo,
a.
como se
juzga,
el
arte
de
la
cultura
occidental.
En
el
rara vez emerge
la
perso–
na.lid.ad,
el
individuo, el
J'O
en luga.r del nosotros; pero,
si lo hace, re acusa con ca.racterist.icas
de
puj~
imaginativa., de <>riginalidad
y
talento erea.dor
1
como en
el caso
de
Jmm
Tcunas
Tuiro
Tupa.,
a
qui.ena.trlbuye
Uriel Garcia.
la
.f
.actura del eele'bre :ptllpito de
la.
Igle.si.a
de
San
Blas
de
CUSCO,
fruto
del
''tra.bajo
a:rduo..
y
13
"consta.ncia," que Cossio del Pomar
n.iega
al
indio.
El
indio es cauee,
disciplina.
1
ritauo,
tan
marea.dos,
que:
cam.
lo
han automatizado;
y
donde hay discl:plina
ha
de
haber con.sta.ncia.
~
queo se
su.stl'aml
a
la
inercta. de
esa disciplina, canscientemente realiza.n obra de teson
y
de esfue-rw
inteligen.te,
oontinuo
y
bien
traba.do;B6·
lo
asi
se explica
el
aport.e
indig~
t.a.n -ealioso
en el
arte
colonial,
aporte
que hace que 1"06tros de
mclios
apa.rezcan en. Una.genes
1
f~
decora.tivas
de
tem–
plos
y
pala.cios.
y
ta.mbien motivos
de
la.
flora
y
fau=
na tipicas serranas.
El
utilizar
estos
ni~tivos
pone de
ma.ni:fresto aguda conciencia.
racial,
y
el ejecuta.rlos me·
ticulosamente,
y
a pesar
de
ello
con ganancia
de
tiem–
po. .
refleja "constancia''.
Lo
que si es cierto es que
.el
a~
indfpna, tnmcado
por
la conquista hi.spana el intpetu cnador que le <
!Q.barecia personalidad en
ipooa,
del Inca eg:regio, severo
pe–
ro roagnanimo,
ha
.sufrido gra.n
da=>medro
en su
call~