b:.~
0 n
los mnos. Por otra parte, he observa–
P.o de manera general q'ue. nos preocupamos
;ma s de ensefiar la Gramatica, la Lengua Ma–
terna en tonos diversos, saltando los vicios de
pronunciaci6n, sin corregir los defectos del
habla ;
de · mane ra que el joven o u.iiio estu–
dian te
sale
de
la
escuela term inando sus es–
tudios cargandose el farrago de sus errorea
de
lenguaje y la jerga de sus provincialis–
mos.
Los motiv os puntu a lizados, me induje–
ron a entrar en este ensayo que dedico a los
:maestros de los departamentos de Loreto y
·San Martin, y por aprecio a los normalistas
.P.elPeru, compafie ros de profesi6n,- insinuando–
les similar obra en la sierra y en· la costa.
Si la aludida sugesti6n encuentra eco, la
modesta obrita habrase inspirado en cosa que
tenga importancia.
El Autor.