los Salas y Valdez, que proceden del conquis–
tador Juan de Salas
y
Valdez.
La casa de la calle de Garcilaso, ocupadc
hoy por el establecimiento comercial de los
señores Braillard, ya no ofrece intei;és arqueo–
lógico por encontrarse casi totalmente recons–
truída.
La otra, la de la calle de Santa Teresa,
sí
'que conserva su antigua arquitectura colo–
uial. En escaleras de esta casa, entre los mu–
ros, hay grandes
r
.obiliarios pictóricos que se
refier en a los orígines de aquella familia.
Casa de Concha.
En la calle d Santa Catalina Ancha don–
de hoy están los almaqenes del co1nerciante
italiano efior C lvo, stáJ la
u
ie casa de
don M rt
e Con ha p er naJe u e tuvo
fi-
guracion e
db
el mo
i
i to revolucionario
de 1814,/ como Sobe n d r
In endente del
Cuzco.
Esta casa es otra de las interesantes po:r
su valor arqueológico. Tiene en la fachada
un balcón de primorosa talla, como ya no hay
otros de igual género, en toda la ciudad.
Casas de los Plzarro.
Propiamente, no quedan ni rastros de
las casas que fueron de los Pizarra, pero será
bueno decir los sitios que ocuparon.
La casa del Marqués don Francisco Piza–
rro quedaba en la parte que hoy ocupan los