EL CUZCO HISTORICQ Y MONUMENTAL
mase de sus bienes 1o necesario para 1a construocici6n d e1 teJn·
p1o, qu e -costó tre<S1cien•to-s mil pesos.
Están e1lterraidios en su reci<nto los dos Ailmagros
y
Gon·
zalo Piz.arro.
En e1 terremoto que des.ttruy6 el
Cuz.coeiJ. 31 de marzo de
1 650 sufr ieron -enonnemente el
temp'lo
y
convento, qu e des–
p ués fueron reedilficados so b1'e el mismo plano ele antes.
Se entra en el
Concven.topor una puerta d e rejalS de hie·
1-r·o, atravesando anbes una e.strecha vereda d e ce.mento que
coDiduce al pequeño y obscuro pórtico, en el que se •en dos
<' Uaelros ele esca o mérito que r epr esentan la conversión de
l os in:fi.eles.
En la portería l a
enci6n,
e.gún el pintor peruano
F elipe Cossío del Po.mar, un cuaidro d e a1grún füterés q u e
:·epresenta escena
rágicas de martirio. "Es una b el1a obra,
d ice su awtor, en
cua
i10
haJy u111 solo de'tail'l•e ¡¡ue no eS't4
bien pintado.''
Se penetra ensegu:iida al primer claustro
y
la vista se va
deslumbrada á. la contemp1'Caión de esa maravilila arquitec·
tónica qu·e, en materia de arte co'lonia.l, es ta'l v-ez lo mejor
que puede ofrecer el Cuzco
y
quién sa;be la Annérica toda.
Es un patio morisco, ulI! pedazo d e la Alhambrar, como al–
gui en ha dic-ho. Pocas veces se h a,brá
hec.hotal lujo de talla–
do en la piedra,
~n
cuya su p erficie sé ha bol"ldaido como si
f u era un eruc;:i,je. Eil. P. m ercedario Fray Antonio Blanic o
iué e: ·director de esta marav illosa obra.
E l s e,g u ndo
c~au stro
no ofreice ·el mismo género de traba·
jo;
parec13
c(}Jllo que :iio se hubie!!e conc'lui.c1o la obra, pues si