/
•
V
.
)
"
)
I
!
72
GUERRA
¡Oh gente del Peru, cuánta gracia y, merced le hace Dios
al visorey, gobernadores, capitanes, que pudiesen vi·vir sin te–
ner necesidad de vuestras personas tan inconstantes, pues
jamás guardastes mucho tiempo fidelidad! y estos que vamos
contando, por una parte decían á su capitan que le habian de
servir lealmente, por otra enviaban ofrecimientos al que ve–
nia, para pasarse á
él.
Gomez de ·Tordoya abajó luégo al rio
par.a guardar la puente como le estaba mandado; el capitan
Garcilaso de la -Vega sintió mucho la prision de Perálvarez
Holguin, otros ho'lgaron
é
tenian sus mañas para avisar
á
Diego de Alvarado de lo que habia pasado.