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DR LAS SALINAS.
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- · 1aritádcf é de su ·veiiida; si era fingido ó no,. Dios lo sabe, que
conoce los corazones
é
intenciones de los hombres. Yen estos
tiempos p·asaban
m~chas
palabra8;que por no saber yo éier–
tamente con el cel.o que eran dichas, ansí en el real de. Al-
. magro éomo ·en la ciudad del Cuzco,
n~
ras pongo, porque
queriendo tomar las informacio.nes verdaderas dellas, veo que
están muy tocados de la particula.r pasion; é por eso yo, to–
mando lo qua. me conviene é supiere cíertamente que pasó ·
así, dejaré lo otro, pues lo <lemas sería cosa rediculosa decirlo.
Vuelto .Hernando Pizarro
á
la ciudad del
~d~cia para que llevasen al real del Adelantado
D.
Diego de Al–
magro
r~frescos
é manteni¡:nientos , para ét
y
para los que
con él venían, é así Jo pusieron por obr_a muchos,
y
enviaban
indios cargados de'
m~cho
pan é carneé otras cosas de las que
ellos tenia:n,
é
algunos escribían á Almagro ofreciendo sus
personas
é
haciend.asá
su servicio; parte de ellos les movia el
pensar que el gobierno de la ciudad habia de ser suyo, é que–
rían ganarle la voluntad, otros, por estar mal con Hernando
Pizarro ;
deseaba~
que
entra~e
en. ella: como
estovie~e,
pues,
el real tan cerca de la ciudad, eran los de Chile bien proveidos
de los vecinos della. Los mensajeros volvieron adonde estaba
el Adelantado, hablaron delante de él
é
de los demas capi–
tanes
é
caballeros lo que habían pasado .con Hernando Pi–
zarro,
é
lo que respondía á lo que de su parte le fueron
á
decir;.
é
·no fiándose Al magro .de las palabras de Jiernando
Pizarro , mandó llamar ante sí
á
Cristóbal. de Sotelo para que
fuese con veinte españoles adonde. estaba ei ca pitan Juan de
Sayávedra,
á
le avisar que tuviese gran cuidado en el real,
pues conocia
á
Hernando Pizarro ser hombre doblado
é
que
por cumplir su voluntad no .ternia.miramiento
á
ninguna cosa.
En la ciudad quisieron decir se tuvo aviso cómo Sotelo babia
de ir adonde estaba el capitan Juan d.e Sayavedra con la gente
de C,hile:
é
que se
ma~dó
poner cierta gente para que yendo
descuidados él
.y
lo? que con él iban los prendiesen;
é
al
tiempo que se babia de partir Sotelo- para ir adonde le habían
mandado, allegó .al .real un vecino del Cuzco, que secreta-
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