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GUERRA
rado en la puente de Abancay, creyéndose de los prometi–
mientos.
é
ofertas de Almagro, le hobiesen prometido su amis–
tad
y
estar en su servicio, despues, como el tiempo se alargase,
Almagro enteramente dellos no 6aba, ni tampoco la mesma
'sospecha dejaba de haber entre ellos teniendo por fingidas las
cosas de Almagro para con ellos, é áun que no iban guiadas con
razon ni en servicio de S. M.,
é
algunos volu_ntad tenían de se
huirá Los Reyes; el capitan Perálvarez Holguin era el princi–
pal en estos tratos y el que más deseaba estar ya delante de
la presencia del Gobernador D. Francisco Pizarro, y como dél
sintieron esta voluntad, hasta veinte amigos suyos se
ofre~
cieron de salir con él del Cuzco. Perálvarez era primo her–
mano de Lorenzo de Aldana,
y
entrambos juntos posaban;
é
como ya Perálvarez con los demas que se habían hablado es–
toviesen de camino para se irá la ciudad de Los Reyes, hó–
bolo de entender Lorenzo de Aldana., porque Per.álvarez le
dió parte dello, é como eu aquel tiempo Aldana estuviese en
conformidad del Adelantado, por traerle de aquel propósito
á
Perálvarez Holguin, le ponía por delante muchos trabajos que
babia de pasar hasta llegar
á
la ciudad de Los Reyes
1
y que
estando todas .las provincias de guerra saldrían muchos indios
é matarían á él
é
á
los demas que querían
ir;
mas no aprove–
chó nenguna cosa estos dichos de Aldana para que Perálvarez
mudase propósito, ántes daba priesa en la ida exhortando á
los que habian de ir con él. Aldana, visto que no bastaba para
que Perálvarez no saliese del Cuzco, se fué al Adelantado, é
con mucho secreto le avisó de todo ello, pidiéndole por mer–
ced, Aldana, que á Perálvarez no le fuese hecha nenguna mo–
lestia ni más que detenerlo. El Adelantado le prometió que así
lo baria, é luégo mandó llamar ante sí á Perálvarez mostrando
quejarse dél, pues recibiendo tan buen tratamiento
y
él ha-·
berle ofrecido su amistad, que así negándole la suya andu–
viese muyendo la gente para que se ausentasen de la ciudad
para se ir á Los Reyes, é le mandó detener en su casa é tomó
dél pleito homenaje, como caballero , que no saldria de la
ciudad á cabo nenguno sin su licencia. A Lo1·enzo de Aldana