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muchas joyas de oro fino con muchas esmeraldas
y perlas en ellas, que todo va li a gran s umma de
· dineros por su preciosidad
y
gran valor. El capitan
de los xpianos fue Don Balthasar de Castilla, hijo
de l Conde de ia Gomera; lo que el
y
los que venían
é"on
~l
ti-:-uxéfon sobre sus personas en aquel día
ta n festiuo, fue mu cho b!·ocado
y
sedas de diuersas
colores y joyas de gran valor, qu e andando en e l
juego de cañas se perdieron muchas que des pues
n o se halla ron au nque fu e ron bien buscadas . En·
tra ron los xpi a nos
y
los moros por dos esquinas
de la pl ac;.a , cada quadrilla por su cabo, con dos
e t anda rdes: e l v no traya el Señor Sanctiago, y e l
otro una med ia luna, los qua les pu estos en esqua ·
dron , los moros a rreme ti eron a l cas tillo tiranclole
muchos arcabuzac;.os,
y
los de l cas tillo como que se
cl e ffencli a n tira ron ci ertos tiros de a rtill e ría y ar·
cabu ze ria , que parescia ba t;:.illa v e rd adera . Estan–
do e n es to e ntraron los xpianos por su cabo y a rr e–
metieron a los moros, a los qual cs hi zieron apa rtar
del castillo como que pclea ua n, y de a lli se pusie –
r on e n sus pu es tos como batalla ap lac;.ada y co–
menc;a ron a juga r ca 11as Yn buen r a to, ha ta qu e
se r ebolui e ron todos, qu e los moros d ie r on a huyr
dando muchos al::iridos. E l c;i pitan castell a no co n
los suyos fueron tras e ll os, que and:rnan a la r e·
dond a de la pla c;a, y prendie r on a l r ey y a todos
lo uyos, a lo qual e hecha r on sendas sogas a los
pe cuezo , qu e pa r a ell o ll euauan de r esp ec to,
y
e l
r ey ,-ie ndose ¡re o se pelaua las ba r bas ele ,-na
ma ca r a qu e traya , mirando a l ciclo y bla ph e –
ma ndo de .\!ahorna,
y
a s i yua hazi endo otros ade -