CAPITULO XXXVIII
DE COMO GON<;:ALO PI<;:ARRO HlZO MUCHOS ARDlDES
DE GUERRA PARA DAR BATALLA AL VISORREY, Y DE
COMO CIERTAS MUGERES ESCRIUIERON A SUS MAHlDOS,
QUE ESTAUA. EN POPAY-A , PARA QUE SE VINIESSEN
A DE CANSAR A
·sus
CASAS
'
Estauase Gon<;:alo Pi<;arrn en la
~ibdad
de Qui-
lo muy a su plaze r y contento, holgandose en ver
que las cosas en que auia pues to la mano quanto a
lo tocante a la guerra,
y
aun a lo demas, le auian
s ucedido bien y prosperament e, 'aunque no sin a l–
g unos trabajos y fatigas que auia tenido en el ca–
mino
y
en. otras pa rtes. Mas emp ero, con la victo–
ria passada no lo sentia por ningun tra bajo,
y
a
esta causa no a uia domingo ni :fiesta que no hi–
z iesse r egocij a r a los capitanes y soldados hazien–
doles correr toros y jugar caña , co n otros pa sa–
tie1npos
y
otras inuencion es de juegos que se
hazian. El tirano estau a como i estuuiera seguro
d e todo
tr~nce
y remate, y que a su parescer no
auia mas que h azer, porqne tuuo entendido y aun
creydo que e l Visorrey no tuui era lapo sibilidad
de la gente como de pue parescio tener . De cuy–
dauasse ta mbien en auer embiado a P edro Alonso
de Hinojosa a Tierra Firme para la cosas de alla,