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Areualo mi entras se vía. s u negocio. E stuuo desta
hecha en la fort a leza mas de cinco a ñ2s,
y
de a lli
le sefíalaron vna casa por carcel en la vill a de Si–
mancas , y de allí, con la mudanya que uvo en to –
das las cosas juOicia rias, le señal a ron vna casa
por carcel en la villa de Pinto. Y despu es andan–
do el tiempo le s eñalaron toda la villa de Pinto
con sus terminas, hasta que despues y al cabo se
sentencio su negocio , y desta maner a estuuo en
estas ca rcel es
~s
de diez años padesciendo muy
g rand es trabajos y mi serias . Mas despu es, Su Ma –
g estad, consta ndole el e su ynocencia y bondad
y
auiendo pa ssado tantos trabajos
y
neces idades , co–
mo xpianissimo r ey y buén señor le dio por libre
y
en gratifficacion de lo mucho que le auia serui–
do en P eni.
y
por lo que auia lasta do
y
padescido
en su pris ion, le dio la encomienda de la horden y
caualleria de Sanctiago, y lo r estituyo en su anti–
guedad en el Consejo Real, porqué de antes auia
seruido de Oydor de la Chancilleri a de Va lledo–
lid. En es te Real ca rgo estnuo mucho tiempo ,
hasta que ya con la carga de sus muchos años no
pudo sufrir la gran pesadumbre de los muchos
negocios .qu e s iempre auia tenido, y por esto, con
licencia de Su Magestad, se r ecog io a hazer vida
r eli g iosa e11 el monesterio de Sant Augustin de
Vall edolid, adonde .biue agora. Pues tornando al
hilO- d e nuestra obra, digo que ci ertos
s~lda dos
que este cosario teni a , vi endo la s ynsolenci as y
demasías que hazia a todas las gentes , y la g r an
soberuia y arrog;ancia que auia tomado , comen·
yaron de Je aborrescer en gran manera ; no pu-