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LA INQUISICIÓ"
alguno, no siendo ordenado de orden sacerdotal, ha–
ya dicho misa ó administrado alguno ele los sacra–
mentos ele nuesta santa Madre Ig1esia.
«SoucrTANTEs .-0 que algún confesoL' ó confeso–
ros, clérigos ó rel igiosos, de cualquier estado ó con–
dición que sean, en el acto de la confesión, ó próxi–
mamente á ella, hayan solicitado sus hijas de con–
fesión, provocándolas ó :induciéndolas con hechos
ó
palabras, para actos torpes
y
cleshonesto , ó hayan
hecho lo mismo fuera del sacramento ele la confe–
s ión en el confesionario ó cualquiera lugar ado nde
se oye de confesión, ó se ha elegiclo .por tal, s imulan–
do y fingiendo, por no ser notados, que oyen ele pe–
n itencia
y
confiesan, aunque sea sin propósito ele
confesar y estando así sólo para tratar sus amores
deshonestos , solicitando ó proYocando á ellos, sin .
que puedan·
~er
absueltos en
¿·
cho caso las dichas
tales personas así solicitadas ó proYocadas hasta que
primero hayan denunciado en el Santo Oficio del
que asi las solicitó, provocó y trató con ellas las di–
chas cosas deshonestas en dicho lugar' ele la dicha
confesión, de la misma manera que s i fuera dentFo·
de11a, antes ó después .
«Ü
sí alguna otra
per~ona
se ha casado segunda
ó
más Yeces, teniendo su primera mujer ó marido vi–
vos; ó que alguno haya dicho ó afirmado que la sim–
ple fornicación, ó dar á usura
ó
logro, ó perjura rse
no es pecado, ó que es mejor y vale más estar uno
amancebado que casado; ó que hayan hecho vitupe–
r ios
y
malos tratamien tos á imágenes el e santos
ó
cruces; ó que alguno no haya creído en ]os a r tículos
ele la fe, ó haya dudado ele alguno dellos, ó haya es-