E"N CARTAGE"NA DE INDIAS
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seiíor Fi cal con el estandarte de la fe, representando
en
la
gallardía con que lo lle,·aba los cxp lcnclores de
su nobleza
y
valiente ánimo; la borla derecha llevaba
el arcediano, doctor don } ernanclo ele Diaz Perei–
ra, y la izquierda el ton ien te do la ciudad, el li cen–
ciado don
ntonio de Lara Mogrobejo; lo último, iba
el seiíor Inqui idor, llevando á la mano derecha al
Gobernador de la ciudad, y á la izquierda, el deán y
proYi or. Corno ordinario, llevaba. u . ciíol'ia bonete,
y
encima ombrero ele auto, in.- ignia:, de legado de
Su
antidad, y dieron vuelta por las cal los que los
penitente , a ·istiendo
á
ver e.:ta entrada
y
todo lo
que
uceclió aquel día en la plaza el más numeroso
gentio que
·e ha \'Ísto en esta parles, estando en
balcones,
ventana~ ,
corredores
y
tablados muchas
sef;ora
y
mujeres principalc . Subió el seílor In–
quisidor con todo el acompañamiento al tablado,
sonando á c. te tiempo Yarios instrumentos de músi–
ca,
y
lo
arcabuceros
y
art illoro, dieron u na carga,
dividiéndose todos, cada uno á sct asiento seiíalado.
Sentóse el señor Inqui sidor en la sil1a sola que
estaba debajo del dosel riquL imo,
y
al principio del
tablado
y
mano derecha se plantó el estandarte de la
fe, y junto dél se sentó el seflor Fiscal en sma alta,
y á la izquierda, en correspondencia, estuyo un bu–
fetillo cubierto ele carmesí
y
oro, en que puso el se–
cretario el cofre del secreto,
y
junto dél, en silla
baja, se sentó para repartir las sentencias . Sen–
táronse por el orden _arriba
di ~
puesto, los cabil–
dos, el Eclesiástico y el Secular. Contiguas á sus
sillas estuvieron las de los ealiflcadores, de quien
tuvo el primer lugar el reverendísimo padre comi-