Que
los
Semi–
narios atim–
dan
á
lo pri–
mitivo de Ja
Orden.
Que
lo.r
Mi–
sioneros
guar..
den
la Re–
gla segun la.t
declaraciones
Pontificiar.
(46)
En primer ·lugar , para que los di-
chos Seminarios en quanto fuere posible,
con el auxilio de Dios , se di rijan
á
la
primitiva observancia de la Orden , se
observará estrechísímamente en ellos la
Regla , segun las declaraciones conteni–
das ,
é
innovadas por nuestro Santísimo
Señor Inocencio XI. en su Motu propio,
que empieza:
Sollicitudo pastoralis,
y
ten-.
gan cuidado los Misioneros de estimar
en todas las cosas mas que las delicias
del mundo la santa pobreza , á la qual
N. P.
S. Francisco llamaba la Señora;
pues Dios proveerá
á
los Operarios de su
Viña , si haciendo un trabajo tan pro–
vechoso pusiesen su consideracion sola–
n1ente en Dios.
6
Pero por quanto ha crecido muchí–
simo el número de Religiosos Mendican–
tes ,
y
la
piedad de los fieles se expe–
rimenta al presente , acaso por , nuestros
pecados., que es cada vez menos
fervo~
rosa , que era al principio de la Orden,
será lícito
á
todos los Seminarios ,
y
á
los Religiosos de ellos usar de aquellas
constituciones Apostólicas, que dexando