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los
otros
Frayles , visiten,
y
an1onesten
á sus
Frayies, humilde ,
y
caritativan1ente los
corrí~
jan ' no les mandando alguna cosa que sea con–
tra su
ánitna ,
y
nuestra Regla ;
y
los Frayles,
que
son
stibditos, acuérdense
que
por Dios
ne..
garon
sus
propias voluntades : de donde firme··
mente les mando, que obedezcan
á
sus Minis·
tros en todas las cosas , que prometieron al Se...
ñor de guardar ,
y
no son contrarias
á
su áni–
ma,
y nuestra Regla ;
y
donde quiera
que
es..
tán · los ·Frayles, que supiesen ,
y
conociesen
ellos no poder guardar la Regla espiritualmen–
te ,
á
sus Ministros deban ,
y
puedan recurrir;
y
los Ministros caritativa,
y
benignamente los
reciban ,
y
tanta familiaridad hayan cerca de
ellos, que les puedan decir como señores
á
sus·
siervos; porque así debe ser , que los Minis-:
ttos sean siervos
de
t'odos l0s ¿otr0s Frayles.
Amonesto otrosí ,
y
exhorto
en·
el Señor Jesu.:
~hristo,
que se guarden los Frayles de toda
soberbia , vanagloria , envidia,
ávari~ia,
cui–
dado,
y
solicitud de este rnundo , detraccion,
y
murmuracioñ ;
y
no curen los
que
no saben
le.tras de aprender letras , .n1as . mire_n , que so·
bre todas las cosas deben desear tener el espí–
ritu del
se·ñor,
y
su santa obra : orar siempré