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~~NtRAL.
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socorrido-por
Luis XIV con aqueJia mag-
Si~lo
nificencia
y
noble
generosidad
que car-acte- X\
7
11.
rizaban
á
este
gran
Príncipe , hizo
a~gunos
esfuerzos para 'recobrar las
tres co=ronas
que
hahia ·perdido
por
su imprudencia
y
preci–
pitacion. Como
la
Irlanda , en que domi-
ttaban
los
CattSlicos
se le ha bia mantenido
fiel , desembarcó allí con cinco mil hcm-
hres de
buenas
tropas que le había
d~do.
I:.uis. Este : pequeño exército reforzado con
un
número
bastante
crecido de
Irlandeses .
que se le
juntáron ,
habría podido
contri~
huir al restablecimiento de sus
negocios ,
si
cometiendo
nueva f:1lta no hubiese arriesga-
do
la suerte de üna
batalla.
Los
dos
cxér-
c-iros·
peleáron en
la~
orillas
del
Boyne
el
1
t
de, Julio de
16 90 .,
la
victoria se declaró por
el
Príncipe de
Orange,
á
quien
derribó una ·
bala de
canon'
y
pasó por muerto;
y
de este
modo se concluyó
esta gran
dispur~.
Jaco-
bo
II ,
tuvo que
volverse
á
Francia ,
y
en–
ce'rrarse en el ca(tillo de San Gerrnan en
Laye ,
que
Luis XIV
Je
había dado
p:tra
al–
bergue. A-llí
vivió
hasta
el
ano
1701
úni–
camente
ocupJdo
-en
su salvacion,
y
sin sen..a
t'ii
al
parecer
el
h1ber
perdido su
grandeza
pasad·a. Su caida
a~arreó
la
de
la Religion
·c;!t6lica
en Inglaterra ;
y
hJsta ahora
por
tentativas
que se
hayan hecho
ha
quedado
su
posteridad excluida . de un Trono , que
le
. ;· .·
Y 3
ha-