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DIA SEPTIMO
ORACION
En esta venerada imagen os veo mi buen
Jesús, revestido de las insignias de la Pa–
sión sacrosanta. Al cuello lleváis la soga
con que viles sayones os ataron
y
arrastra–
ron crudelisimos, y ella recuerda también
la afrentosa
é
inhumana flagelación. Ador–
na vc.Jestras sienes la corona de espinas que
las taladró en atroz suplicio; una de vues–
tras manos tiene la cafia, que como á Rey
de burlas os pusieron, oh Rey de mi alma
y
Rey de cielos
y
tierra; la otra, en fin,
muestra la cruz,
instrumento de vuestro
suplicio y de mi redención. Que recuerde
yo estas cosas al contemplar vuestra sagra–
da tmagen, para nunca olvidar hasta qué
extremo os ha llevado el amor y para em–
pefiarme en JTlOStrarme agradecido. Amén.
DIA OCTAVO
ORACION
Vencedor del infierno, cuyo poder des-