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lfANUEb GAROJA IRHWYEN
,sarro11ame los recursos que encerraba la ciudad para
poner al mal experimentado el eficáz remedio que re–
clamaban de consuno la religiosidad y el decoro de
sus habitantes.
~mprendióse
la formal repar(l.ción
precisa~
y
la&
diferentes obras que ella demandó. se llevaron
-á
efec–
io
activamente. mediante la li.beralidad del público
y
el celo de las autoridades civil
y
e:clesiástica que eran
tivoda por el ócio
y
trastornos que todo lo cJislocnr011. El Yirey
dictó
un
llando para moderAr Jos precios de los
ilr\c{culo~:~
de pri–
mera necesidad; pero pN>ceptos de ese
~énero
rarn vez se obcde–
'een y
t\l
wi~wo
se convenció
d•·
ello,
couíe~mndo
que
I!IU
alza. pro–
..-enf~:t
de h\ t'lK!tt:>éz. {l(unl
~nltndo
tuvieron
las órd.enes expt>di–
dn..tl
paru que los materiale!:l de
coo~trucción
y
los
jornal~ e<111ser~
vruwn un
valor
eqnih~tivo.
.El
mal en lo
to<:nnte " urtfculos
de–
aubsistenci~t,
gravitó sobre las ehtses
indi~clltes
de nna. wnnera
ala.rmunte: ntenuólo sinl'mlbnrgo ese ejerCicio de
ct~ridud
que en
~s
0
:fe:~~e:~~~~! ~~~~~a~r¡a~a~~1!~~~d~~ ~~tW,~~!~ !~~~:
nero y en especiet<. EI.Duque de In J>nlnta. y su
e~:~p~
excedieron
en su
d&~preudimiento
á
lus esperunz.u..tc de las
familitu1
pobrf'~
y
de
las que llegaron
á
serlo oon las desgracins
del
terremoto.
En una
relt\c:ión
hecha
sobre
el part-icular ¡)()r un padre de lo.
Compni\fa. se asegura que
loa&ooorro~
queen todas
proporcion~
distribuyó
el
Virey, de
su
peculio
y dumnte un
¡~ilO,
pfu:.firon de
GO,OOO
~os.
Gracias 11 sus
11t.inadn..q
dispOlliciones. la casa de expó–
llito~:~
eUlpezó
.1.
ree<lificnrsc y tiC
f:l(l \Vuron
deln miseria
lo:~
huérfa–
nos que
en
ella
hubo y
que
de!~pués
del
terremoto
andnbun
por
las
c::.~Ues
mendigando
~n
subsistencia.
euy!~?~~~l>~~:'~rd~;~~r~d~j~~~~e~~i~:b:~~=~b~~:
oouerfn que
daba~¡
lu. plu:za, y que en el pi!<o inCerior se constru–
yesen
hnbitaciouca pnrn el Virey y salas pura
lo::~
tribuuntes. De-
f>r::,~!~ ~~~'d!
0
~n~~oó~:~u:s~~
0
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s~~ó~~~·b·a~:: vr~
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¡~!
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e~~~p~n~
wn
~od1\IU
ftuuilifl.
duran~
'i7
dln.s.
El
~raba.joindispen'$able paro
repnrnr
y dejnr expeditf's
lo~
iewplo~t,
n"edi6ear
~
y bucer Yf'fPcciones en 'oda
la
ciudad,
deuumda.bamucho tiempo y grandes recuri:IOll. Ewpréñdlóse, sin
uwbnr{,."', y se coutinu6 oon la
act.ividnd
que
penuit.rnla natura–
leza de
la8
obras
i
el esLado nada \·entajoso de laa fort·unua
pa.:r·
ticulares y
d~>
laanmt.aade
los
Conventos.
Entre las
vfc~iwa.s
notables que hizo
el
t-erremoto de 20 de
OctubYede 1687 se cuenta a.l Gener'ál D. Juan Ramfre1 de A:rella.–
tao, que en ese mlswodia iba
á
ma.rc.barse para aor,·ir un Corregi·
m.leoto, y el qne quedó sepultado bajo
las
rt1inns
.ittnto
oon 8u
esposa. 1· un bijo pequeño. Fereoió a8I miJmlO un joven limeño
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constancia
para Jos estudlOS. Calculóee en 600
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en Liwa