ADVEB.TENCIA DEL EDITOR
DE AREQUIPA.
EL atentado á que se refi ere este espediente, y el urna–
río mismo y resolucion librada sobre él, ha sirlo un asunto
que al paso que ha llamado la atencion de toda clase de
jentes; se ha manejado con una re erva y silencio prudente,
que tal vez ha convenido durante su secuela
á
fin de no
alarmar los espíritus que escandalizados por un atentado se–
mejante desplegarían en pró ó en contra segun su diverso
modo de opinar sentimientos recíprocamente desagradables.
Mas cortado que ha sido por el juez de
la.
instancia mi–
litar con di ctámen del auditor, es ya tiempo que el publico
se cerciore de las verdaderas circunstancias del caso, y juz–
gue imparcialmente acer ca de las razones en que se ha
apoyado la citada resolucion.--EI editor al hacer la publica–
cion de las piezas principales que contiene el espediente con
la relacion de la secuela de la causa, no se propone acrimi–
nar al sarjento mayor Vij il, sino unicamente presentár
a
la
consider acion de los lectores e l hecho como es en
si,
y segun
se halla esclarecido de oficio, á fin de que en tiempo alguno
se padezcan equivocaciones, ó se susciten falsas especies pa–
ra obscurecerlo ó alterarlo con perjuicio de personas que
podían tal vez ser atacadas en su honor y bien merecida re–
putacion.-EI editor al mismo tiempo para la ilustracion de
los lectores que no esten instruidos jurídicamente, en estos
negocios, se permite poner algunas notas, y copiar las dispo–
siciones legales que debier on haber r ejido al auditor en su
dictámen resolutivo, y que sin duda no qu iso hacer valer en
el ca. o por consideraciones politicas, que influirían en su
ánimo.
Nota del lllmo. Sr. Ob ispo al Sr.
Gmn
Mariscal D.
Gui–
llermo Miller.
nREP BLICA PERUANA-Gobierno ec)esiástico-Arequi–
pa octubre
ll
de 1834-Al Illnw. Sr. gran mari cal y coman·
dante jeneral
D.
Guill ermo .Mdler.--IIlmo. Sr.-En la ma·
ilana de hoy
y
cuando me hallaba aun r ecoj ido entró á e··
t
mi palacio
D.
Jua11 Antonio Vijil ayudante ele campo d
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