DE QUARES1\1A.
P R O P O S l TO S.
~
t
Puesto que no hay
v~rdadera
g1oria, ni bien algu·
no que sea real sin
la sal
vacion ,
y
qu~
esta
sal vacion
es
la posesion del mismo Dios,
i
puede
estar
jamas á
un precio
demasiado alto
~
i
Qu~
idea no aebemos tener de ella,
y
qué .caso no debemos
hacer~
iEs
demas~ado
vender todos
sus bienes para cobrar e5te tesoró
~
i
es demasiado sacrifi–
carlo todo para conseguir esta
perla~
(
Matt h.
13. )
i
Que
bien nos faltará quando poseamos
á.
Dios~
i
que
faltará
á
nuestra felicidad
si
nos salvamos
~
i
que objeto mas digno
de nuestra arnbicion
~
i
que gloria mas vistosa
y
mas bri- ·
llante
~Nos~
sabe si es falta de fe
ú
de
juicio
el no compre–
hend~r
esta verdad : ciertamente es lo uno
y
lo otro. Ce–
sa en este mismo instante de- ser tan poco cristiano
y
tan
po-co cuerdo. Concibe una justa idea de tu salvacion ,
y
obra'
de hoy en adelante; mas conforme á esta idea. No empren–
das cosa alguna sin haber consultado ántes este plan. Pesa
todas las cosas en el peso de la salv'acion , mídelas todas
por esta regla. Negocios, empresas, quehaceres, viages, es·
tado , condicion, fortuna, cargos, empleos;
haz
que todo
se refiera á Dios,
y
que todo sea con relacion
á
la
salva–
cion: no hagas nada que
n0-
te
sirva
para la otra vida , co–
mo aconseja
el , após~ol.
Dil.e
á
tu concupiscencia,
ó
por me·
jor decir, al tentador.
i
ese deleyte ilícito,
es~
empleo con·
seguido por tan · m3.los medios, es'a hacienda mal ganada,
todo
esto
vale tanto como mi salvacion
~
i
La
posesion de
todo esto, que .quando mas ,durará
ha9ta
la muerte, me ia–
demnizará de
la
pérdida de mi alma
1
i
Qae pocas culpas se ·
cometerian, que pocos motivos
habria de
arrepentirse
si
se
discurriera siempre de este
modo~
Ya
se te
babia
dado
una
regla semejante
á
esto;
i
pero .Ja has
seguido~
i
y
te
servirá
mas, ó
te
apr~vechará
mas ésta que
se
te acaba
de
dar
~
2
Mira que aprecio hiciéron los Santos de su salvacion,
y
de todo. lo que podia
~ontribuir
á merecerlos-.)una eterni–
dad
feliz.
i
Por
qué
otra fortuna suspiráron
~
y
para mere–
cer esta
ver~adera
felicidad, ¡que sacrificios, qué. comba–
tes!,
qué
viCtorias
!
Oiscurre por todas las edades
y
todos los
estados ;
¡
q~1e
exempJos de virtud, de modestia, de
mor–
tificacio.n
!
¡que modelos tan excelentes en todas las condi-
.
F
2
.
cio-
'