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. AÑO
CHRISTIANO.
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rá aquel temerario en su presumido fervor,
y
en una vir–
tud siempre caduca., siempre inconstante en esta misera–
ble
!i~a
!
Ah Señor
!
es.!~
,sola
('!Isa
confianza basta.. para
prec115tta'rnos en f
unesttstmas · ca1das ·aun dentro
del·
·mis-
mo camino de la
p.er~ecciop. .
. .
. ,
•
¡
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...
.
' PUNT
o·s~EG
UN·DO.
C
<?nsidera que no es
mén.os ·insuficiente ni
m_é~o~
falsa la
·
·,confian2la en las
grac~as
que hemos rec1b1do del Se-
fior., si no 'está acompañada de una humilde ·desconfian–
.Za
de nG-sotros mi,s,mG>s;
y
si exponiéndonos imprudente–
mente
el:
la.s mas peligrosas tentaciones, presumimos de–
masiado · en aquellos auxilios extraordinarios que niega
Dios
a
los orgullosos,
y
franquea con mano liberal
a
los
hum:ildes.
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R~fi~xlon'a
t>ieñ
la respuesta que
·<lió
el Salvador.
a
sus
dis~pulos
quando se mostráron .
tan
huecos con el poder
qüe
elt-
misrñó' Señor los ·
babia
concedido para lanzar los
demonios.
ro vía
Satanás
que
caía precipitado del cielo.
con la velocidad
con
que se desprende el
rayo
de la nube.
Como
si les
dixera : guardáos bien de engreiros por
las
gracias
que
os-
ha
concedido mi bondad; mayores fuéron
lás que dispensé
a
aquellos espíritus puros que crié para
que compusiesen mi ·corte. Dotélos de mas excelentes
do–
nes: hícelos
las
mas nobles criaturas de todo
el
univer–
so: ..
c~loquélos
en el cielo donde ocupaban las primeras
sillas;
y
c-00 todo eso su presuncion los precipitó en los
á~ismo's.
El que mas gracias ha recibido del Señor , mas
estrecha cuenta tiene que dar
a
su justicia: los favores mas
señalad.osimponen mayor obligacion de fidelidad
y
de
agradecimiento.
Trabaja en el
negocio
de tu
salvacion
con
temor
y
con
temblor.,
dice
el apóstot No cuentes ni con
esa ·exaGta
pu·r~za
de
cosiumbres, ni con esa ir1oéencia de
mucbos años: es una flor que
un
soplo la rnarchit.a : un
gqípe
_tlff
v1entó hunde
en
el mar al navío mas ricamen–
te
cargado: ·poco ayre
es
menester para apagar la aator–
cha ma·s :encendida.
Buen
Dios
!
quántos perecen por una
falsa ;segutitlad1 ·
·p .
A las pasiones jamas- se las domestíca , ni el enemigo
de
.}a ;- salvacion
se
gana nunca por el camino
de la
colm–
pla~enda.
Bs hombre
perd!d'o el que
no
está siempre en
ve-