DEVOTOS. .
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s~hrá
resucitarle, si quiere
que
sobreviva~
Así
las her..
Dfa , XVII~~
manas de Lázaro no le eovian ·otro recado que este:
Señor , el que amas .está.enfenrio.
¡Oh,
si ncisotros
.1
amáramos verdaderamente
á
Jesu-Chrjsto! ¡qué-poco
cuidado s_e nós
da~ia
'·qué poco te·ndriamos que temer
de todos
'l.osaccidehtes de la vida! Pero Jésu,Chris- .
to ,
no solamente es
nu~stto
Dios; es ta·mbien nuestro _
Maestro. Se hizo hombre por nuestro amor; y ·nues–
tr a redencion es la mayor obra
qu~·
ha salido de sus
manos..
?,Qué
derecho
no
no~ d~.
á
su.bondad,
á
su mi- .
sericordia,
á
sus liberalidades ,
1a
qual'idad de Reden..;
tor
yde
Salvador~· ~SoB
menester otros.motivos para!
inspirarnos una entera confianza en
él~
Parece que ..
Jesu-Christo
n9
nos pide sino esta confianza, para oír'
,
nuestras súplicas, y para otorgarnos q.uanto le pida-
mos:
Crédit& quia accipiétis:
tened una ·en.tera con-.
fianza en mf, y ' seréis oídos.
Pedid
en
m'i
nonibre,
y ':
todo lo alcanzar@is
d~
mi
Padre..
~No
te he
di~ho
que
si
crees,decia el Salvador
á
Marta, verás á Dios glori..
:fkado~
¡Y
á
vista de esto, estamos faltos
de
confianza!.'
= )'J
PUNTO S ·E.G
UN.DO.·~
'-
.
)
.
'
C
onsidera que Jesu-Ch_risto no es solamente nues- ·.
tro Dios ,, nl;lestro Redentor; nuestro Salvador;
sin.o que
e~
ta1:1bien nuestro buenPast6r, nuestro tier:-.·
no
y
amado Padre.
Rep·asa
en tu ímaginacion todos
los nombres que torna' todas las comparaciones de
que se -sirve , sus parábolas , sus milagros ;
y
en toda
su :vida mortal no hallarás
C<ilsa
qm~
1
no 's·ea una prue-.•
ba sensible
1
del amo·r que nos tiene , y de
~la
excesiva
ternura con que nos mira.
Y
o
soy
el
Pastór
bueno,
di~