SANTISIMA V1RGEN.
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no : no te será posíOle morderla, con todq_ tus esfuer•
zos, con toda tu malicia, no serás capáz
acercarte
ní aun
a
sus talones : el hijo que ella dará al mundo,
destruirá tu imperio desde su nacimtento:
Et
tu
insi–
liiaberis ca/caneo eius
.(a)
Hasta entonces serás tirano;
pero entonces pasarás
a
ser esclavo;
y
teniendo
la
ca–
beza magullada' no podrás
yá
hacer mal' sino
a
los
que quisieren ponerse voluntariamente en tus manos.
Como desde la creacion del mundo fue el Mesías el
grande objeto de los deseos , de las promesas
y
de las
profecías del antiguo Testarnento, se dexa conocer
cla–
ramente que su dichosa Madre debió ser al mismo tiem–
po el objeto de aquellos deseos, de aquellas prediccio–
nes
y
de aquellas promesas.
(b)
No estrañeis, dice el cé–
lebre Sofronio, que tantas gentes publiquen a porfia las
grandezas de la Madre de Dios, quando el mismo Dios
está haciendo su elogio desde el principio del mundo:
todo el antiguo TestameQto está lleno de rasgos
y
de
figuras , que son como ios diseños de su verdadero re-–
trato. En la zarza encendida que vió Nioysés reconoce–
mos la figura de vuestra admirable
~irginidad,o
Madre
de
Dios, exclama la Iglesia.
La
v~ra ~i:odig l osa
de Aa–
ron, que florece so a en el Tabernaculo, y que de.spues
se guardó con tant(} cuidad_0
en
él ,Arca
del
Te~tamen
to,
es una figura
no
menos expresiva de esta fec pnda
virginidad.
(e)
El vellon de Gedeon, embebido todo en
el
rocío del C i.elo,
mi~ntras
que toda
la
tierra de
su
al–
derredór queda seca, es una de las
mas
particulares
fi–
guras de la Madre de Dios, dice San Ambrosio; est
es
lo que hace decir
a
la Iglesia, que quando el Verbo
D i-
Ssvi-
, (a)
Gen.
3. (b)
Sof.
Serm.deAssump.
e)
S . Ambr;.
Serm
. 13.