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EXERCICIOS
LUNES
fue como el grito rde la v.ocacion 'd
0
e)os Gentiles
,,
á
la
fe.
Habiendose retirado eL Apóstol ácia el
mediodia al terrado que servía de techo
á
la ca–
sa
en que estaba alojado , ( los techos en aquel
país eran
plano~,
y
se retiraban
á
elfos las gen–
tes para estár con mas quietud
y
mas apartadas–
del ruido)
fue
repentinamente
arre~atado
en
es–
píritu ; vió
el
Cielo abierto,
y
una cosa que
ba–
xaba
de
él
á
manera de un mantél colgado por
las quatro esquinas ,
y
que descendía del Cie,
lo
h~sta
la
tierra; había
en
este mantél de .to–
da especie de animales, así quadrúpedos, como
reptíles
y
volátiles. Al mismo tiempo oyó una
voz
que le decía : Pedro , levántate , mata
y
co–
me.
St:gun)os Intérpretes, esta especie de man–
tél representaba
á
la Iglesia·;
y.
las quatro es–
quinas del mantél figuraban las quatro partes del
mundo ,
y
las
diferentes Naciones que habian
de abrazar
~l
Christianísmo,
y
componer la Igle–
sia sin distincion
de
Judío
y
de
G~ntil.
La
res–
puesta de San Pedro da
á
conócer bastantemen-"
te que todos aquellos animales eran inn)undos;
esto es , de aquellos qlte la Ley de Moysés
pro–
hibia comer. La compar.acion que quería Dios
hacer conocer
á
San Pedro !de aquellos animales
con Jos infieles , que pasaban por impuros
y
por
inmundos, confirma esta aplicacion.
Y
o
me
guar..
daré , Señor , respondió el Santo Apóstol, -
de
comer ninguna cosa inmunda é impura, No
lla–
mes ya impuro é inmundo
~
replicó
la
voz,
á
lo
que Dios ha purificado. Hasta tres veces tuvo
el
Santo es,ta vision i,despues de
lo
qual, reqrado
al
Cie-