rD
EVOTO S.
Por efte tiempo la afaltb una enfermedad tan ex-
Dia
III.
traordinaria , acompanada de tan crueles dolores que
la
tuvieron por muerta,
ha
viendo eftado tres dias
Gn
fentido. Sirvi6fe Dios de aquelb. efpecie de exrafis para
dcfcubrida muchos my íl:erios'
y
para dada
a
entender
lo mucho que havia·de h1cer
y
padecer por
fu
amor
e n lo reil:ante de
(u
vida. Hizo confianza de eíl:o ,
no
íin alguna facilid ad
a
algunas perfonas indi(cretas )
y
de aqui fe
la
originaron nuevos motivos
para
exerci-.,
tar
la.
paciencia.
Comenzófe
á
murmurar de
fu
retiro,
á
cenfurac
·fo
modo de vida ,
y
á
not:tr de imprudentes ,
o
de ex–
tra.vagantes füs exercicios d monificac ion
y
de pie–
d,HL
Probó Dios por algunos años la virrnd de
fü
fi er–
va con el fuego de b. mas viva per(ecucion;
hafta
que:
volviendo San Germán de
fu
viage de Inglaterra, con_.
fundió~-
todos
füs
envidiofos, haciendo juíl:icia
á
la.
virtud de nueíl:ra Santa.
Pero no duró mucho
la
ferenidad. Etparcibte en
París una voz
faifa
de que los Hunos (e acercaban para
deíl:ruír la Ciudad : afuilaron(e todos ,
y
queriendo
la.
fanta
doncella confolarlos, afegur:rndo fer falfo
el
ru–
mor ,
fo
levantó contra
ell.i por e fb.
obra de caridad
l a m:-ts cruel
perfecucion ,
y
eíl:uvo
á
pique de que
b.
quemafen como he hicera.
y
maga. Hallaba(e San Ger–
nün en Italia cerca del Emperador Valentinilno,
quan~
d o tuvo noticia del peligro en que fe halbba la Sama.
Inmilmeme trabajó por libertarla : dctpachó luego
a
París al Arcediano de Auxerre, y
el
miúno Arcediano
eíl:uvo
a
peligro de fer maltratado por aqu l furiofo
P L1eblo. Solamenre fe deliberaba fobre
el
g"'nero de
fü~
_¡:>l ic io con que
fe
la havia de cafügar,
y
muchos
bavi.ari
E
opi-: