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Enero.
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I nueíl:ro cuerpo debe fer hoíl:ia viva,
fanta,
y
agu.–
dable
a
Dios, quál debe fer
íit
purei1
?
N1da irri–
ta tanro la ira de Dios como una viétima fucia
'f
a(querofa. Podrémos ofrecer nueíl:ros cuerpos
a
Dios
fin vergüenza?
Es
Chriílüno, es racionJ.1 nueftro cul–
to , qu:mdo le prefemarnos un cuerpo afquerofamente
manchado por el pecado ?
·
No os conformeis con eflemundo
,
dice
el
Apoíl:ol .
No hay cofa mas opueíl:a al efpirim
y a
las máximas
de Jefü-Chrifto, que las máximas
y
el
efpírim del mun–
do. Conformarfe con él es renunciar el Moral
del
Evangelio , es
feguir el
efpaciofo camino
que guia
a
la.
perdicion.
Y
qué ot ro camino ligue la mayor
parre de
las perfonas del liglo
~
A quien fe procura imicar
en
el
mundo ?Q!é ley fe ligue ? Qgé máximas fe apren..
den? Aquelbs perfonas ambiciofas
y
vanas ; aquellas
almas terrenas
y
fenfoales ; aquell.:ts víll:imas de füs
proprias paGones , figuen por ventura la dotlrina de
Jefo-Chriíl:o ?Son de la mifma Religion que lós San·
tos
?Sirven
a
un mifino Señor ,
a
un mifmo Dios
:
Y.
no hay Cobrados motivos para hacer eíl:as preguntas?
Y
qué tendrán que refponder las perfonas mundanas
a
qualquiera
qL1e fe
las haga
?
•
'
,
~eformaos
' .Pr?0gue el Apoíl:ol,
irnhuyendoos
en
maximas,
en
prmctptos
enteramente nueves,
y
comra4
rios
a
los que haíl:a aqui have is feguido. Digo :
y
no
ferá
ya
tiempo de hacerlo ?
A
qué
queremos efperar pJ...
ra
emprender cíl:a reforma
?
Podráfe decir que la co·
·menzamos .mu
y
temprano , quando
yá.
debiera eíl:ár
acabada
?
Es
pG!ible
que
eternamente
hemos de
efi~r.
p1·