C A P I T U L 0
X L
I I.
54?
8
Ego Dominus , hoc est
nomen meum : gl_oriam meam al–
t e ri non dabo
a,
et laudem meam
scu
I
p t il ibus.
9
Quae prima foerunt , ec–
ce venerunt : nova quoque ego
annuncio : antequam oriantur,
audita vobis faciarn.
10
Cantate Domino canti–
cum
novum , laus eius ab ex–
tremis
terrae :
qui descendi–
tis in mare , et plenitudo e–
ius ; Insulae, et habitatores ea–
rum.
r r .
Sublevetur desertum , et
Civitates eius : in domibus ha–
bitabit Cedar: laudate, habitato–
res Petrae , de vertice montium
clamabunt.
i
2
Ponent Domino gloriam,
et laudem eius in Insulis
nun–
ciabunt.
1
3
Domin us sicut fortis
e–
gredietur , sicut vir praeliator
suscitabit zelum : vociferabitur,
K
Despues de tuber demostrado la
vanid ad de los 1dolos , pronuncia el Se–
nor su senrencia , dicie!ldo :
Yo
so lo soy
el Senor .
E l Hebrcfo
~y1 ~ ~~. ~
:
Yo Ido-
7.Jah
;
yo so lo soy el qne soy : este nom–
b re ,
y
lo que en el se significa , se me
debe a mi solo. Y
a g loria que me es
tm propia , a ningu o la dare, y mucho
menoi; permitire que se de
a·
unas mu–
das estatoas , obra de hombres.
s
En ei;pecial el cautiverio de las diez
Tribus de Israel
e~ta
ya cumplido. Yen
prueba d e que e6to es asi , ved co910 se
han cumplido tod as las cosas que
enia
aciunciadas d esde el principio : y os dire
tamb· n otras de nue·vo que se cumpl iriu
'1el mismo modo en lo venidero.
3
El Propheta alborozado por l a vic–
toria de Dios i;obre los idolos,
y
por lo$
~
I nfra
XLVIII.
llo
Tom. VI. ·
8
Yo el Senor
I
,
este
es mi
nombre : m1 gloria no la dare
a –
otro , nJ
m1
loor a los simula–
cros.
9 Aquellas cosas p rimeras
2 ,
ved
q.ueya acontecieron : nuevas
ahora yo las anu ncio: y os las re–
velo a vosotros a n tes q ue sucedan .
IO
~ntad
al Senor cant ico
nuevo
3
,
su loor desde
JFs
extre–
midades de la tierra: vosotros
los
q ue descendeis a la mar, y su ple–
nitud
+;
l as Islas , y los morado–
res de ellas.
1
r
Regodjese el de ierto
s,
y
sus Ciudades: Cedar habi tara en
las
casas: decid loor' vosotros rno–
radores de Petra
6
,
levantaran la
v,
desde la cima de los mantes.
r2
D a rin ellos gloria al Se–
nor '
y pu
blicara~n
1.f.>
Islas
SU.
alabanza.
r
3
El Senor como fuerte sal–
d
ra , coma varon guerrero des–
pertara su_
zelo:
alzara la
voz,
y
bienos grandes que habian de venir a Ios
homb res con la venida del Messfas, con–
vida a todos a que alabe n al Senor por su
incomprehensible g ra ndeza
y
misericor–
di a ,
y
a que sobre esto le ca.men este
nuevo Cintico triumphal o
Epinicio.
4
Los que
o,
vegais por la mar, y to-
qo lo que h
en ella.
s
Los C edarenos , y otroi; Arabes
y
Pueblos que moran en el desierto. En
seutido alegorico se convida aqui a todo
el Plfeblo de los Gentiles , a que dexada&
las supersticiones abominables de la ido–
l atrfa , levanten puras sus manos hicia el
Cie lo, cantando sin cesar las alabanzas
d ebidas a su Salvador ·y R edent
6
De Petra, Capital d e la A rabia
P~trea. El H ebreo:
Que !os moradores de Pe-
1r4 akm la voz de la cima d' los m:ontu.
Zzz
~
I