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LA PROPHECIA
DE
ISAIAS.
1 2
Et
erit :- cum apparuerit
quod laboravi t Mo11b su per excel–
si
suis ,
ingred ietu r ad Saneta sua
u t obsecret , et non valebi t.
13
Hoc ve rbum q uod
lo–
c utus est Dominus ad Moab ex
tune:
14 Et nunc locucJtus est Do–
mi
nus
,Ecens : In tribus annis,
quasi a_,nni rne rcena rii , aufere–
tur gl<?ria Moab super omni
Populo multo ,
et
relinquetur
p a rvus et modicus , nequaquam
multus,
12
y
aCaeCera
I
:
quandO
Se
viere lo que Moab trabaj6 so–
bre sus alturas , entrara a sus
Sa ntuarios a orar ,
y
no podri.
13
Esta es la palabra que
habl6 el Senor a Moab desde en–
t6nces
2
:
14
Y ahora ha hablado el Se–
nor, diciendo: En tres afios
3,
corno afios de mozo de soldada,
sera quitada
la
gloria de Moab
con todo su grande Pueblo ,
y
quedara chico
4
y
pequeno ,
y
no mucho. ·
~
•
Y acontecera , que quando Moab
v'Je re que ha trabaj ado inutilmente en ir
a sus lugares altos para implorar el socor–
ro_ d e sos idolos que ado ra en e ll O-s ,
y
que nada
w
aprovechan; acudira a otros
T emplos
y
Sal'"£uarios suyos, pero sera
en vano , porque nada la podra librar de
la extrema calamidad que le aguarda.
0
tambien : Mas no podra entrar , por
la
consternacion en que se veri ,
y
porque
los enemigos de todas p artes _le acosarin.
2
Ya de algnn tiempo a esta p arte.
Amos ya lo habia proph<?izado tambien
intes que Isaias. AMos
n:
3
En e l espacio de tres afios ; esto es,
tres afios despues que sea arrui nada Jeru–
salem, dari priocipio N abucodonosor a
la guerra contra los Moabitas ;
y
el quin-
to afi o despues de la ruina de J erusa lem,
destruira
y
dexara aso lado el pals de Moab.
Otros e nti enden estos tres afios del tiem–
po
que d ur6 es t a gue rr a.
y
estos tres anos
serin molestos
y
llenos de trabajos para
los Moabitas , como lo son para e t que se
le toma
y
paga p ara trabajar por
anos ;
y
al_
contrario u tiles
y
provechosos p ara
N a–
bucodonosor , en cuyas manos pondra el
Senor todas las riquezas de Moab . 0 tam–
bien: Sera n tres afios cabales , sin quitar
ni poner, como sucede al que trabaja por
afio recibiendo su soldada ; poque aquel
que le tome no permite que sea un dia
m enos , ni el jornalero consiente que se
le anada un d ia mas.
. -
4
Y sus moradores se reducirin a tal
numero que facilmente se podrin contar.
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xvv.
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Prophetiza la ruina de Damasco
y
su Reyno por Jos Assyrios
;
y
asi–
mismo la del de las diez Tribus. Promete a estas que quedarian de
ellos algunas reliquias
,
las qua/es a su tiempo se convertirian al
Senor. Les hace ver
,
que padecerian estas calamidades por haher
.
.
,
dexado a Dias. Ultimamente anuncfa el estrago que haria el
An-
· -'}/ en. el exercito de los AssJJrios.
I
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Damasci. Ecce
1
Carga
de
Damasco ' .
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ease el Cap.
XIII.
D amasco era
C apital de la Syria.
Theglathphal~sar
la
destroyo,
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9. en ti empo del
Rey Acaz : supr.
VII. VIII.
y
ciento
y