ll-IS
EL
HOMBRE
~
oe entran1bos.
Y
como los vicios,
y
desorden de la vida sean ineoln-–
patibles con selnejanre union, nun–
~a
podrá
vivir bien
en
el
111atrüno~
nio el que vive mal para sí lnisn10;
y
asi
hallarélnos en la práélíca, que
oe
la
co'rrupeion
del
padre de fami"
lia's
nace insensiblelnente la de la
stiya,
qUe 'dividida
ésta
en
parciali~
dades, que
trahe
consigo
la
deseon–
fOl'fnidad
entre 'el1narido,
y
lnuger,
insensiblelnente los
arroja
esto
en
el
odio
recíproco
1
que
la santa,
util;
y
dele(table
union
del
matrin10nio,
rota
una 'vez,
se
convierte
toda
la
casa,
y
familia en
la
confusion ,
des..
orden,
y
aun
lnaldades ,
que puedan
hacerla
semejante
'al
Infierno. Y
co~
Í110
no
haviendo
concedido
Dios
la:
perfeccion
á
esta
naturaleza hUlna–
na. ,
no puede
ha
ver
en
ella union,
én que
los
unos
no
tenganlos
que
sufrirnQs
-á ,-lo5
otIOS)
_ ·a~i
debelno
,,,,,,
,.
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