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EL HOM
RE
qu
1
acer
1
ara en ontrar con
1
n1~
util,
ya
que por to se
d
r
i,
11
ql1anto sea po ible, lo 111a gen r 1,
variandose taL11bien
lo
111a util,
gun se varía la for111a del
g
bi rn , 1
genio del Principe,
ó
de lo qu
1
repres ntan. Con que in toda
e
t
consideraciones no e posible
a en–
tar, que esto,
ó
aquello e
ln–
jor
para
elegido,
y
con ella puede
la
prudencia hacer encontrar con lo
111enos 111alo,
ya
que
no
e:1 posibl
fiarnos nunca en que seri
10
111 jor
todo aquello, que
aún
e ti por ve–
nir. Esto es en quanto
á
los elTI–
pléos públicos ;
y
en quanto
á
1
estin1acion , que naturahl1
nt
ape–
tece cada individuo,
aña
iréa10s,
que no podra con egllirla
1
que
n
poseyere alo-una parte util,
I
I
1
menos delee. able
á
10 otro, lo
qual
es
1
oriben de toda e ti111 cion,
b–
teniendo la
mayor aqu
1
n quien
ro