l'
GLOR[A.
103
-
.
-
ha
so~orrido
tantas,
ta~tísimas
veces;
á
la que .
me sacó de la enfermedad que tuve el afio pa- '
sado;
á
la. que no ha permi.tido·que mis hijos
and~n
desnudos;
á
la que se ha dignado con–
solarme, honrando
D?i
humilde morada;
á
la -
única persona que me ha dicho: 'cCaifás,
tú
~
\
no eres tan malo como dicen. Confía en Dios
y~spera.
:t
-Eres tonto. ¿Eso qué significa-:?
-Significa que uf$ted es un ángel...
¡Ayl
sr
se me presentara oca.sión de mostrarle mi
agradecinlÍento ..• ¿Pero' yo qué puedo, si soy
como un guijarro de
l~s
calles,
á
quien todo
el mando da 'con el pie?
-Vamos, no te acuerdes de mis
benefici~s,
que no valen nada,-dijo Gloria con impacien–
cia, mirando al cielo
á
ver si había concluído
de llover...
-¿Que no me acuerde? ¿Que no me acuer–
de de quien me' da el pan de cada día? No la
aparto
á
usted ·del pensamiento
á
ninguna
hora, y creo que antes que olvidar
á
mi ángel
tutelar, me olvidaré de mi mismo
y
de la sa1-
vación de mi alma. Me parece que veo en to-
das partes
á
mi Di vina Pastora. Anoche,
se~o
rita Gloria, soilé con usted.
-¿
Conmigo'? - dijo Gloria sonriendo.–
¿Qué Boilaste?