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P. XXII.
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veniente que .alli
fe
fudfe la herida, adonde
dl:aba
la .
culpa~
(e)
Lo quiQto : tambien hizo alufion la efpada de San Pedro, con
el
golpe de aquel iniquo criado ,
á
la reformacion que deben
ha~
cer fus Sacerdotes , de los excefos de la familia de los Minifiros
de Dios , porque no es pequeño daño del Clero
el
mal egemplo,
permitido de los que firven al Templo y fus Sacerdotes. Lo fex–
to : cortó la oreja al criado de Cayfás, porque fuelen fer los cria–
dos las orejas de fus amos, y por fus oídos entran todas las mal–
dades de la caía ,
y
del gobierno, pues con chifn1es , parlerias, Y.
delaciones injuftas los inquietan, y perturban. Si
á
Cayfás
tocá~
ra
el
golpe , fuera enmedio de la cabeza, porque lo era de aque--:
lla iniqua prifion ; pero co1no fue al criado , tiró derecho
á
la
oreja, como quien en ella
fe
la corqba
á
Cayfás.
~
Ta1nbien dudan los Expofitores ,
fi
cortó
el
golpe del to..
do la oreja
á
Ma1co,
y
tengo por muy cierta la comun fentencia,
que fe la cortó del todo.
(d)
Lo primero : porque eífo fignifica la
. palabra
Amputa"Pit,
(e)
que propiamente quiere decir, fe la
a~ran-
'
l
l
I
1
I
I
J.
1
I
dº
/
co con e go pe , o a cerceno, o ie a aorta, corno
;icen a cer-
cén• .Lo fegundo: porque fi no fe la cortára, no lo
expli~ára
con
un vocablo tan fign1ficativo, fino que digera , hiríó en la oreja
al fiervo del Sacerdote ; pero añade,
Et
amputa'lJit auriculam ejus,
y
le rebanó la orej , eífo es propiamente ,
Amputa"Pit.
Lo terce-
. ro: porque fino e la huviefla cortado , no fe la huviera puefto
el Señor ,
y
el
milagro fue volverle
á
poner la oreja , y no cu..
rarle la oreja;
y
afsi para volver
á
ponerla
i>
fue necefario que
precedieífe
el
cortarla. Lo quarto : porque no obíl:a , que
dig~
el
Evangelifia., quando le curó
el
Señor
á
Maleo, que roc6 la.
·oreja, y le fanó ; pues cur6
á
Maleo , con rdHtuirle la oreja ,
y
para reftituirfela, fue necefario tocarfela. De fuerte, que
el
Señor
tomó la oreja de Maleo, que San Pedro habia quitado de fu lu–
gar,
y
el
Redentor
fe
la volvió
á
fu lugar,
y
efte fue
el
milagro
del Señ91.
. 4
Y
de aqui fe deduce , que quando San Pedro dió la cu–
chillada
á
Maleo , aun no habian prefo al Salvador de las almas,
ni tenian atadas aquellas manos bendicas ;
y
fe conoce, en que
defpues que San Pedro con la cuchillada cort6 la oreja al atrevi–
do criado , halló todo fu reme4io en las manos del Señor ;
y
las·
Part. !I. delTom. II.
L
2
que
(e) Vid. Maldon. in Matth.
i6.
Barrad. tom. 4• in Evang. lib.
6.
cap.
17.
Corn.
Alape
~n
Matth.
z.6.
{d)_
l'r~pabi!io~fentcmt. apu~.
Maldon.
iq
Mat~h.
z.6.
(e). Matth.
26.v.p
º