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Biblioteca Nacional del Pero

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Esta rebolucion trajo su orijen desde los pueblos altos de Catca

y

Ocongate

qye sintieron el fermento de Tupa Amaro en los emisarios qye este les imbia con

sus acostumbradas incitatibas qye a repartido desde el principio de su rebelion.

Mobidos los yndios de aquellos dos partidos qye son los peores de toda la diosesi

bajaron impetuosamente al pueblo de Caycai qye empiesa la linea de la quebrada

y

tira hasta

[mm]

de Urubamba terminando en [ilegible] de Tambo

y

Lares a la

otra banda del rio qye corre de por aquella serrania formandose el pais mas

delicioso qye a voto del mejor gusto tiene el reino por qye ambas riberas fuera

de ser agradables a la vista pQr los arboles

y

bosques que cubren con armonia el

sitio poblado a distancia proporcionada por una

y

otra frente, logran del mas

vello temperamento

y

cielo venigno de modo que a lo menos en Yucai

y

Urubamba se a observado una primavera continuada por todo el ano.

Esta porcion la mas apreciable del

Obllip.si.do

se vio emvestida de las tropas

furiosas de yndios que bajaron desde el pueblo de Caycay robando haciendas

y

ganados

y

cortando puentes hasta Guaillabamba para cuia defensa se destaco

de este cuartel una partida al mando de dQn Juan Nicolas Lobaton Corregidor

de la

prov~a

de Urubamha fueron atacados los yndios a la otra banda de

Guaillabamba con tan felis suceso de nuestras armas qye murieron mas de

docientos quedando muchos heridos. Tuvo mucha parte en esta victoria el

fidelissimo

y

noble Casique de Chinchero Pumacchaua con la prontitud que

acostumbra este les ganaba a los enemigos la espada

y

trastomando los cerros

con su gente se dejaba ver batiendo en las alturas bandera blanca pQr ser divisa

de paz, lo incitaban a baxar los otros de la facsion contraria qye ocupaban la

falda de la montafta

y

decendiendo el Casique hasta una distancia proporcionada

para ofender oprimia con galgas a los enemigos obligando a unos a botarse al

rio en que se aogo el segundo de Tupa Amaro

y

a otros estrecharse en los

desfiladeros donde pudieron emplearse a satisfaccion los sables, fusiles

y

lansas

de los nuestros.

Tamvien se solemniso esta victoria en la ciudad con las mismas

demostraciones qye la primera qye bolbieron los soldados con algunos yndios

pri- (f.7)

II

cioneros. Poco despues se repitio el triunfo en la plasa de Yucai qye

esta cituada entre Urubamba

y

Guaillabamba en ella perecieron al impetu de

nygfilras annas mas de trecientos yndios de un grueso de mas de tres mil qye

habian bajado mas escarmentados con la derrota pasada concurriendo con igual

esfuerso

y

actibidad el Casique mesmo de Chinchero

y

toda su feligrecia de

Urubamba Maras

y

Yucai a dilijencia de sus curas dQn Manuel Gaioso de la

primer dQn

Man.Y.el

Castillo de la segunda

y

dQn Manuel Alsamora de la tercera

a quienes unio el dQctQr

d.Qn

Antonio Valdes cura de Coasa q.u.e se hallaba en

aquella ocacion en el pueblo de Urubamba. Estos buenos ecleciasticos

contemplando qye hacian el mejor obsequio a su Prelado cuio celo tenia bien

encargado a todo el gremio de curas la defenza de sus respectibas doctrinas asi

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