103 / 110
En
ropa apolillada hallará U.
mis
patotadas sobre Alberto Navarro Viola,
48
Mitre
49
y
Zorrilla
de San Martín
5
º.
48
Alberto Navarro Viola (1857-1885) tuvo una vida muy corta, apenas 28 años, pero suficiente para que fuera
considerado como una gran promesa literaria de Argentina. Su trabajo monumental
y
siempre visitado es
Anuario bibliográfico de
la
República Argentina
(1879
y
1887); además tradujo a clásicos como Byron, Musset,
Heine, Hugo, y otros. También fue ecretario del presidente
Julio
Roca .
49
Ba.rtolomé Mitre (1821-1892) combinó con brillantez las ta.reas políticas y las intelectuales, pues ademá de
haber sido gobernador de la provincia de Buenos Aires y presidente de Argentina (1862y1868), tiene estudios
célebres sobre Belgrano
(Historia de Be/grano)
y
San Martín
(Historia de San Martín);
también, fue el fundador de
uno de los diarios más importantes de su país:
La
Naci6n.
Palma y Mitre coincidieron en su análisis del drama
quechua
Ollantay,
sobre el cual se había levantado una controver ia. Señala el historiador peruano Raúl Porra
Barrenechea: «El gran quechuista cuzqueño Pacheco Zegarra declaró que
el
lenguaje del drama era arcaico
y
que su forma lo acusaba como una obra escrita en el siglo dieciséis. El historiador argentino Mitre
y
don
Ricardo Palma denunciaron el error y sostuvieron el carácter prehispánico del drama. Factor fundamental de
revisión de este concepto fue la intervención del gran humanista argentino Ricardo Roja . En su libro
Un titán
de los Andes,
Rojas diferenció la leyenda del drama.
La
leyenda es indígena, primitiva; el drama es colonial y
dieciochesco. Rojas descartó a Valdez como autor del d rama o le pospuso, desconocedor de su figura y
trayectoria vital. Por eso planteé desde 1943, en Ja cá tedra de Literatura Americana y Peruana de San Ma.rco La
necesidad de estudiar
y
aclarar la figura de Valdez».
Raúl
Porras Barrenechea, «La paternidad definitiva de
Ollantay».
50
Juan Zorrilla de San Martín (1855-1931), destacado escritor, político y diplomático uruguayo. Fue diputado por
Montevideo, actuó como activista católico (lo que no impidió su amistad con el liberal Palma). Como periodista
fundó el diario
El Bien Público,
y como diplomático repre entó a s u país ante algunas naciones europeas.
- 99-