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Heptasilabos.
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Por rejas, miradores,
Postigos i t'erreros
Sus mil r espiraderos
Franquea la ciudad;
Ya parten los obreros,
Ya -ran los labradores
Y bajan los pastores
Al llano i los oteros,
Do tienen sus labores
O el pasto mas feraz.
· Octosílabos.
Ya por las abiertas rej as
Do quier se ve a las mujeres
Sus domésticos quehaceres
Oficiosas empr ender:
I aumenta el mido i se escucha
De los hombres el acento,
I se estiende e.l movimiento
De la vida por do quier.
Enneasilabos.
Reflejan al sol los tejados
De fresco rocío mojados;
Inunda las calles la luz:
Caballos i carros quc cruzan
Por entre la gran multitud
El polvo al pasar desmenuzan,
Doblando el rumor e inquietud.
Decasilabos.
Ya se vuelve el martillo i ]a sierra
I la voz del que ven<le a escuchar,
I otra vez desvelada la tierra,
El silencio i la calma destierra
I otro día comienza a pasar.
Endecasilabos.
Y
a.
en 1uz el universo r esplandece ;
La noche entre sus nieblas arrastró
Los sueños con que el alma desvanece,
I la sangre en las venas enardece,
I el aliento sofoca i entumece
Los miembros del que insomne se a.jitó.
De arte mayor.
Las vanas quimeras del sueño, la mente
Del jóven delante del dia lanzó,
I libre i sereno su espíritu siente
Que calma tranquila le dió nuevamente,
I nueva existencia la luz le inspiró.