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Imajínate, hermana,
Un jóven, cuyo cuerpo
Tiene de alto dos varas
Si les quitas un dedo.
Mi cabello no es rnbio
Pero tampoco es negro,
Ni como cerda liso,
Ni como pasa crespo.
La frente es espaciosa
Como hombre de provecho,
Ni estirada, arrugada.,
Ni adusta mucho menos.
La~ cejas bien pobladas
I algo oscuro su pelo,
I debajo unos ojos
Que es lo mejor que tengo;
Ni mui grandes, ni chicos,
.Ni azules, ni mui negros,
.Ni alegros, ni dormidos,
Ni mui vivos, ni muertos.
Son grandes las narices
I a mucho honor lo tengo,
Pues narigones siempre
Los grandes hombres fueron:
El célebre Virjilio,
El inmortal Homero,
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El amoroso Oyidio
Mi amigo i mi maestro.
La boca no es pequeña
Ni mui grande en estremo;
El lábio no es delgado
Ni pálido o de fuego.
Los dientes son mui blancos,
Cabales i parejos,
I de todo me rio
Para que puedan ·verlos.
La barba es algo aguda,
Pero con poco pelo;
Me alegro, que eso me,nos
Tendré de caballero.
Sobre todo, el conjunto
Algo tosco lo creo:
El color no es mui blanco,
Pero tampoco es prieto•
Menudas pero muchas
Cacarañitas tengo,
Pues nunca faltaron
Sus estrellas al cielo.
Mas por todo mi rostro
Vaga un aire modesto,
Cual trasparente velo
Que encubre mis defectos.
J. J. DE ÜLMEDO.
Ecuador•