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Garrilaso_. 7'.~
Viendo el gran Caballero, que encogido
En el r~cienna.cido cu~rpo ~staba.•
_Entonces lugar daba mesurado
A Vénu~ que ásu lado estaba puesta: ·
'Ella ~o.n mano ·presu y abundante
Nééhr sobre el infante desparcfa;
Mas Febo la -desvía de aquel tierno
Niño, y daba el gobierno á sus hermanas. ·
Del c~rgo ~stán ufanas todas nueve.
El tiempG> el paso mueve, el nino crece, .
Y en tierna edad floree~, y s~ l~vant~
Como feli,~ en buen terreno.
Yasin · pr~ceto ajeno daba tales ·
De su ingenio señales) qu~ ~spantaban
A los que le criaban. ·Lnego estaba., -
Como una le entregaba á ui1 gran maestro,–
~e con ingenio diestro, y vida.honesta,
Biciese rnaniíiesu al mundo y clara
..AqueJla áoim~ rar:t que allí via,
Al niñff recebfa con respeto
Un viejo, ~n ~uyo aspeto se vía junto
Severidad á un punto ~on dulzura ..
'2.l!edó desra figura como e1ado
Severo y espantado viendo el viejo,
~e como si en espejo se mirárq,
En cuerpo, edad y cara eran conforrnes~En
esto el rosiro á. Tórmes revolviendo'
V ./
'
. 10 que estaba riendo de su espanto.
De